Los días en el mundo de la cocina solían transcurrir tranquilos, aunque hay que reconocer que también habían días catastróficos, como cuando al señor Pimienta le daba por molestar a los habitantes de la cocina o cuando a don Cuchillo salía a jugar a descuartizar o cuando el disparatado de don Tomate quería acabar con su vida, y así podría seguir con las desgracias que ocurrían en el mundo de la cocina, pero mejor vamos a dejar que se las cuente el héroe de esta cocina, el salvador de los desvalidos y de los no tanto, ante sus ojos Super Huevo Frito.
Sean todos muy bienvenidos, soy Super Huevo Frito a sus ordenes, el superhéroe de la cocina y les contaré cómo me hice superhéroe.
Era un día tranquilo en el mundo de la cocina, antes todos los días eran tranquilos, yo era un simple huevo, que pasaba todos los días en mi cajilla verdosa jugando con mis hermanos, hasta que un día apareció un extraño nunca antes visto, se hacia llamar Mister Martillo y quería que todos le obedeciéramos y al que no lo hacia ¡zas! se llevaba un mister martillazo, las nueces fueron las primeras en sufrir las consecuencias, las muy duras de cabeza se revelaron contra Mister Martillo y este sin pensarlo dos veces ¡zas! las destrozo en el instante. En la cocina el miedo se podía oler, Mister Martillo era muy poderoso y todos le obedecíamos, era tanto el miedo que las frutas no maduraban, los vegetales se habían vuelo amarillosos, la leche tenía nata, todo estaba cambiando, tenía que hacer algo, así que puse un poco de aceite en la sartén, sin que nadie se diera cuenta, rompí mi cascarón y me coloqué en él y esperé con un poquito de sal, cuando ya estaba listo me puse una capa y un antifaz (como los que había visto en las historietas) tomé el carrito de super y con el viento golpeando mi rostro fui a enfrentar al malvado Mister Martillo.
-en nombre del mundo de la cocina te ordeno que te vayas- enfrenta Super Huevo Frito a Mister Martillo con aires de superhéroe
-y tú quién eres? quién re crees?-
-soy Super Huevo Frito, el protector de la cocina-
Y desde ese día comencé a combatir el mal de la cocina y a ser el superhéroe más codiciado de todos.
papelucha
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