Siempre me he preguntado,
en qué estaba pensando Dios cuando creo a la mujer,
y reconozco que el hombre, fue un ensayo error,
y que en la mujer se pudo remediar la falta de emocionalidad,
Pero, ¿podemos decir que ser sensibles es una ventaja?
No será un colmo para nuestra cotidianidad femenina, dolernos, estremecernos y enamorarnos con tanta facilidad.

Y más encima cargamos con un estigma mensual, que nos revoluciona hormonalmente, para que seamos ¡más sensibles todavía! cuatro veces al mes ...y seguidas.
Ja! esto es una gran broma y de las pesadas.

Y cómo dejar de mencionar, que en nuestro destino se cruzará un ser, de una casta un poco más alta,
probablemente proveniente de Marte,
que se detendrá, nos mirará y con romántica sutileza nos dirá "Estás bien rica"!!,
como si fueramos parte del menú del día,
y saboreándose, supuestamente nos mirará a los ojos, que para él se encuentran una cuarta abajo del cuello.

Y acomodándose los pantalones, como si algo mutara con independencia, nos regalará una flor,
cielos ¡que hermoso detalle! pensaremos,
y nos asombraremos por la delicadeza del gesto, ilusionándonos la vida, al creer que hemos encontrado a un alma gemela
con nuestra misma sensibilidad,
Pero arrancar una flor, y regalarla ya muerta, es ecológicamente hablando, una brutalidad!!!,
y ni hablar de los bombones, sabiendo que estamos a dieta, porque nuestras caderas son suceptibles a acumular bombones de chocolate,...

...y podría seguir ejemplificando, pero creo que con esto basta para crear controversia en la dinámica diaria de o entre féminas y .....mmm, ehhh ellos.