Era una tarde de aquellas en las que Él se encontró con algunas letras, algunas palabras,...
...y demasiados pensamientos, definitivamente tenía que plasmarlos con su pluma sobre un papel. Pero esa tarde no. Tenía varios días que sus ideas estaban claras, pero por alguna razón, no podía escribir, simplemente las palabras no salían. Sin embargo esta no era la causa para no escribir esa tarde.
Después de mucho tiempo, la vería, no sabia como era físicamente, y en realidad era muy poco lo que conocía de su personalidad y carácter, pero a través de unas pocas cartas, ya sentía que la conocía lo suficiente para conocerla.
Al otro lado, Ella organizaba sus cartas y pensaba si salir o no a su encuentro. No había sido una buena semana, y pasaba por un momento de tristeza y algo de soledad, como siempre empezaba a hundirse en un mar oscuro de tétricos y lúgubres pensamientos, del cual para separarse un poco de él, escribía algunas historias, que por lo general al final tenían un giro inesperado y terminaban algo deprimente.
Él esperaba en el lugar acordado, sin haberla visto antes, sabía que la reconocería con sólo verla, miraba su reloj, pero ella no llegaba...
...La pregunta en su mente empezó a triturar su seguridad, aquella seguridad que con los años da tener esa mascara implacable, mascara que ella con alguna que otra palabra fue capas de eliminar sin que el se resistiera…
10 minutos y ella no llegaba…
Su mente empezó a jugar y trajo aquellos recuerdos en los cuales todo fallaba, nada era suficiente. Saco aquel libro en el cual escribía, en el cual creaba e imprimía sus sentimientos, en el cual había escrito algo para ella.
20 minutos y ella no llegaba…
Seria la constante desde ese momento ya que ella no llegaría…
y Él entre el trago, el tabaco y su tristeza pasaría esa noche
preguntando por que?... EL HELADO SE DERRITIO Y EL CAFE ALGO DULCE SE ENFRIO...
Tarde muy tarde entre una copa mas de las que El debía tomar... sobre la mesa quedo una hoja que entre algunas arrugas, algo de lágrimas y un poco de manchas hechas por el licor que desteñía la tinta decía.
“y ella no llega…
Mientras la gente pasa, yo aquí…
Solo…
Esperándome, esperándote, esperándonos… esperando una respuesta...
Una respuesta a un por que?
Son palabras entre el miedo y la duda las cuales harían que mi mascara cayese hasta el abismo sin infinita posibilidad de volver a mi vida…
Mientras tú… borras ese libro de promesas pretéritas que en mi mente calan ahora que no llegas…
Y solo aparecen en el horizonte mentiras de colores entre un rojo de promesas, un azul tristeza un verde melancolía y un lúgubre gris…
Que va consumiendo al arco iris de tu hablar”...
...Aún metida en sus pensamientos, por una corriente que sintió recorrer su cuerpo, medio tomo sus cartas, apuntes y un pedazo de papel con la dirección indicada, no tenía tiempo de arreglarse, si apenas se puso una chaqueta.
Sabía que era ya muy tarde, que lo más posible es que ya él no estaría esperándola, pero el deseo interno que nace desde el corazón porque un sueño se cumpla, le indicaba que lo encontraría.
Su corazón latía fuertemente, empezó a caminar muy rápido y sin darse cuenta ya corría. “Por favor que este”, “por favor que este”. Era lo único que cruzaba por su mente.
Pensaba en mil excusas, “No pasaba transporte”, “Estaba perdida, no encontraba la dirección”, “Te había entendido que a esta hora”, “Tuve que quedarme a trabajar un poco más” incluso “No encontraba las llaves y no podía salir de mi casa”. Pero lo único que quería era encontrarlo.
Poder decirle, que con él había dejado al descubierto parte de su alma, que su máscara de rudeza y frialdad, con él podía quitársela. Que le había enseñado un mundo mejor, lleno de ilusiones, esperanzas y que realmente en ese punto, estaba un poco confundida con respecto a su futuro. Necesitaba verlo.
Al llegar vio como un hombre salía por la puerta del café, sintió frío en la piel, y quedo por instante quieta viéndolo marchar hacia la otra dirección. Era él, podía sentirlo, pero tuvo miedo de seguirlo, alcanzaba a ver su mirada triste, y sus mejillas húmedas.
Entro al café a sentarse. Había un desorden de hojas arrugadas sobre la mesa, una nota desteñida y una pluma olvidada. Al leer la nota, sentía como en su corazón se iba posando un gran peso, un dolor intenso del alma iba fluyendo como lluvia a través de sus ojos. No pudo tomarse el café, sólo decidió pararse e irse de nuevo. Huir nuevamente tras su eterna mascara.
De su maleta sacó un sobre y una tarjeta, le dio un beso a la tarjeta, introdujo la nota que había encontrado con la tarjeta en el sobre, sin antes leer la tarjeta nuevamente en voz alta...
...“Gracias por haberme sacado de una espantosa realidad, y haberme transportado a un mundo tan maravilloso. Todo lo que tenemos en nuestros corazones es necesario expresarlo. De lo contrario, nos iremos envolviendo en oscuras mantas, que poco a poco, van envolviendo todo el brillo de nuestras almas, pudo ser maravilloso de continuar.
Att.
Alanna
PD. En dos meses, es mi boda”.
Cerró el sobre, lo dejó sobre la mesa junto a la pluma olvidada y salió a su casa.
El caminó, durante una o dos calles, su copa en la mano ya no tenia licor, solo el aroma de una noche como muchas, una noche de perfecta soledad…
Al llegar a la esquina, miro hacia atrás tratando de encontrar una sombra de aquella a la cual no conocía… y pensó
“de pronto no fue suficiente tiempo,
de pronto no encontró la dirección,
de pronto solamente el transporte se demoro,
de pronto ella ya esta hay…”
solamente salio corriendo, un carro brevemente lo toco mientras pasaba la calle
Él... callo al piso…
pero no importo…
de pronto paro...
y bruscamente miro el carro que lo había atropellado, a su conductor que pávidamente lo miraba…
sin dudarlo tiro la copa a este…
con tan mala fortuna que se ratificaría su mala puntería…
la copa se rompió antes de tocar el carro...
Él saldría corriendo con un dolor infernal en su rodilla por el golpe…
Al legar al café vería como una mujer se alearía del mismo mientras la soledad se apoderaba del café.
Se acerco a la mesa dándose cuenta que su papel ya no estaba y una carta ahora reemplazaba el desborden que había dejado al irse unos minutos antes…
Se sentó y temblorosamente pudo leer lo que Alanna dejo…
Eran lágrimas de rabia las que querían salir de sus ojos, tantos das esperando el momento y por su estupidez había perdido todo…
Ella si llego… si importo… ella ¡…
ella era la mujer que se alejaba…¡
si ella era…
Corriendo salio del café… y en un taxi una sombra se alejaba con su ilusión…
El no sabia que pesar… sonrió por saber que si era posible y al mismo tiempo abrió la carta… para leer su final… aquel que no pudo leer dentro del café por la emoción,
“Att: alana…
Pdt.. Me caso…”
de pronto el frió paso por su cuerpo y su minúscula sonrisa desapareció…
Se casa?- dijo- como así que se casa?
por que me lo dice hasta hoy?
hoy… cuando ya esta en mi mente y en mi corazón…
Por que solo hasta hoy?
Camino por las mismas dos calles que momentos antes había caminado esta ves la tristeza haría que este camino terminara… sentado en el piso con un poco de humo en su boca y una botella de licor que aliviaría su tristeza por un segundo…
Un poco mas tarde entre lo turbio que decía aquella hoja entendió que no era una despedida… entendió que ella no le decía que se alejara… entendió que ella le suplicaba que la salvara de aquel destino que había escogido antes de poder conocerlo… antes que su letras se hubiesen metido en su corazón… antes de la duda… antes de abrir lo ojos y ver que su vida al lado de esa otra persona...
Solamente saco su teléfono y marco
Ella no contesto… solamente la grabadora
Y el mensaje que él dejo…
“Detesto estas maquinas
Sabes alanna…
Entiendo lo que quieres decirme…
Sabes hoy entendí que… bueno… aunque nuestro idioma son las letras y la tinta
Hoy tengo que decirte…queeeeeeee… bueno ya sabes…
Que si existe un dios… realmente exageró al crear una mujer como tu…
Y por eso…
aunque este algo …
bueno la verdad muy ebrio…
te advierto que por nada en el mundo te dejare ir de mi vida…
Lo entiendes no te vas a deshacer de mi…
y sabes por que?
Por que ahora entiendo que a ti también te da tanto miedo como a mi…
Darse cuenta que estamos empezando a enamorarnos”
Upssssss... me siento malito...
Me voy a casa ya… estoy muy mal”
y se despidió con...
“alanna te he dicho que te quiero…
Chao”
Él colgó y algo mareado camino hacia su casa...
Entre paso y paso veía como todo transcurría y una pequeña sonrisa se desprendía de su boca…
Camino por las calles mientras el licor hacia su efecto… no había prisa nadie lo esperaba… ya no…
Prendió un cigarrillo y se dirigió a la puerta donde una sombra se hacia mas evidente, con cada paso, no entendía que hacia alguien a esa hora de la noche en la puerta de su casa
Llovía y hacia frió…
Acercándose a la puerta la luz empezó a descubrir la figura de una mujer….
Será Ella – dijo – y en su confusión mintió a su conciencia creyendo que alanna estaba hay…
Poco a poco se descubrió la figura y sus ojos algo mojados le dieron la verdad…
Una voz tenue lo saludo…
El cigarrillo cayó al piso mojado y se apago…
Sus manos en la cabeza y su voz que no era capaz de contestar...
De pronto el licor ya no hacia su efecto, sus hombros empezaron a sentir como si el mundo pesara mas con cada segundo que pasaba, sus manos empezaron a temblar y una lágrima empezaba a salir de sus ojos, la fuerza de sus piernas falló y quedo arrodillado, ensimismado, sorprendido, intimidado, absorto, atónito…
La miro a los ojos, esos ojos durante tantos años habían sido la razón de su vida, vio sus labios, aquellos que lo llevaron al cielo con un beso, su cabello aquel que se enredó en sus dedos formando sueños de viajes infinitos, juntos y sin nada mas que el significado de los dos…
Tomo su cara y se limpio los ojos, y de nuevo esa tenue vos diciendo hola…
Hola, acompañada con la mirada tímida, de aquellas que son capaces de derretir el polo norte…
Una mirada entre el miedo del ¿que me dirá? y la ternura del ¿me extrañaste?
Una mirada que dijo todo, dijo perdóname, te extraño, hace frió y abrázame… solo una mirada que acabó todo en un segundo…
De pronto una lágrima empezó a salir por sus mejillas…
Mientras con el miedo que la invadía salto y lo abrazo con todas sus fuerza…
Era un abrazo solamente…
Mas el tiempo se había detenido entre sus brazos, el tiempo retrocedía y los recuerdos aparecían en su mente, era solo un abrazo que vio como el mundo era insignificante mientras estuviere con sus brazos cruzados en su cuello para posteriormente ser correspondidos…
La lluvia caía… Ella y El dejaban que se mojara su vida… no importaba nada estaba en sus brazos…
Ella la mujer que días, meses, años atrás había trasformado su vida…
Y que sin decir nada después de algunos años…se fue…
Desapareció con sus ilusiones y su sonrisa…
Ella, la mujer que al irse el mostró que el mundo cambia de color en un segundo de un rosa perfecto a un oscuro melancólico.
Ella, quien se alejó dejando algunas cartas olvidadas y un corazón en pedazos, sin ninguna explicación…
Ella el amor de su vida…
No hubo palabras… no hubo preguntas… solamente en sus brazos y mojados por la lluvia entraron a casa mientras el frió y alguna sonrisa perturbaban el sabio silencio…
Al cerrar la puerta otro abrazo un poco menos húmedo y mas caluroso, sin lluvia cayendo, pero con mojado por las lagrimas que se desprenden después de tantos días alejados…
Su mano bordeó su cara quitando el cabello de sus ojos, dejando ver por fin la cara de la realidad después de tantos días…
Y ella igual de bella… con sus ojos tiernos… lo tomo con su mano izquierda en su cuello… y los dedos de su mano derecha dibujando cada parte de su cara hasta llegar a su boca lo tomo en un beso casi inmortal donde sin un ápice de palabras le decía cuanto lo había extrañado
El sorprendido retiro sus labios, y la miro a los ojos…
trato de decir algo… pero ella con su dedo en su boca le dijo… silencio… y el beso continuo remembrando cada día de los 5 años en que juntos construyeron un castillo de besos y promesas ,de abrazos y perdones y algunas cosas mas que en esos momentos no se piensan…
había tantas preguntas, tantas respuestas y tantas explicaciones que en el silencio de ese beso quedaron…
la lluvia caía fuertemente y el frió cambio de cara en la cama que hace tantos días no veía la figura de ella en la geografía de sus sabanas…
Sin pensar se deslizaron los harapos mojados de cada uno… y entre beso y caricias se comprobó que la historia nunca se olvida…
Muy… pero muy en la noche… ella de espalda y en abrazando el silencio continuo y Morfeo con su infinita tranquilidad aniquilo sus intentos de preguntas… ella durmió y el absorto tomo una hoja, escribió y doblo el papel, lo introdujo entere el sin fin de cositas que una mujer guarda entre su maleta…
Sin mas que decir la abrazo y la acompaño en su viaje por los caminos del soñar…
Hacia frió y entre sus sabanas refugiaron sus cuerpos…
Hacia frió… entre sus sabanas despertó, su cabeza sufría las consecuencias de los incesantes intentos de locura alcohólica de la noche anterior…
No quería moverse, no quería pararse… no quería saber nada del mundo…
De pronto abruptamente recordó… volteo y solo encontró un vaso agua y una carta que decía…
“Eres un fantasma…
Un fantasma que día y noche retumba en mi mente…
Que recorre mi cuerpo y doblega mi orgullo…
Eres un fantasma que camina tras mis pasos…
Mientras yo… corro de tus intentos de recuerdo… camino, corro y tu al final siempre a mi lado… en mi mente… en mis sueños…. En otro cuerpo y el mismo recuerdo…
Eres un fantasma que en la noche me toca y en el día me habla… que en la noche me sueña y en el día me impulsa… eres el fantasma de mis mas preciados intentos de amor…
Eres un fantasma de mi pasado y mis intentos de futuro, eres mi tortura, mi deliciosa tortura… mi antigua tortura…
Mi fantasma, viéndote ahora, aquí, a mi lado, indefenso, dejo a un lado mis excusas para abandonarte y recorro cada parte de tu cara con mis manos mientras tu con tu infinito silencio me dejas amarte por ahora sin preguntas, recorro mis recuerdos y tus tristezas, mi soledad y tu espera…
No es justo y por eso volveré… pero mientras esto ocurre, perdóname y déjame llevarme esta noche como algo tuyo...
Gracias por tus no preguntas y mis no respuestas gracias por dejarme volver a nuestro pasado de tranquilidad para en la mañana despertar en mi desastrosa realidad… que algundia abandonare
Perdóname …
te lo prometo volvere...”
continuara
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