Y me siento, y pienso en la nieve, en el frío que tendrá, en lo sola que está allá arriba... entonces, frente a mi, un espejo, me miro, pienso... tan blanca ha sido siempre mi piel? es que acaso ningún color me acompaña esta vez? no lo creo... así voy subiendo hasta mis ojos... veo cristales empapados de miel, pero miel agria, pasada, seca... busco mi cabello, queriendo encontrar sin sentidos, me encuentro con razones, oscuras y opacas... miro mis labios deseosos por encontrar, pero me hablan de sequedad... desesperada busco mi pecho, que florece, lleno de mariposas... mariposas muertas de esperar... bajo... mi vientre vacio, acumula esperanzas, que de vez en cuando desecha... miro otra vez y siento el frío de la nieve... |