un vampiro mordia mi cuello mientras yo solo me limitaba a recitar versos sus ojos fijos en mi blanca piel me recordaron el dolor de estar aki,de nacer su vida tan llena de mortalida covertia la mia en una mas saco mi sangre tan dulcemente y saco la llave para abrirme bruscamente y dentro de las lagrimas olorosas a pecado juntas nuestras animas volando hacia algo inesperado
Texto agregado el 05-07-2005, y leído por 127 visitantes. (4 votos)