Me nutro con tus ojos,
recorriendote desnuda,
la lluvia de tu cuerpo
me cubre,
en su ternura manta.
La salina mar de tus piernas,
la dulce miel de tus labios,
el maduro fruto de tus senos
me envuelven en abrazos...
Te adoro.
Te extraño.
Te amo.
Texto agregado el 04-07-2005, y leído por 139
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