Me acercaré quedamente
hasta tu suspirar de niño tierno,
me duele cuando sufres
de tristeza,
te llevaré una estrella
entre mis manos
para que toque la pena de tu alma
la envuelva con su luz
y la transforme
en miles de pequeñas estrellitas.
Podré tomar tu mano
desde lejos
rozaré suavemente tu mejilla
mi sonrisa dejaré sobre tu almohada
para que se refleje en tu rostro
en la mañana,
también el osito que nos baila
ese que no conoce
el sabor de la tristeza.
Y la noche que cobije tu silencio
te cubrirá de lluvia cristalina
mientras protejo tus sueños
hijo lindo,
y luego al volver de madrugada
trayendo en mi frente tu beso
esperaré por la mejor de tus sonrisas
que ilumine mi camino de regreso.
26.06.2005
Texto agregado el 27-06-2005, y leído por 265
visitantes. (5 votos)
Lectores Opinan
18-08-2005
Te llevaré una estrella entre mis manos para que toque la pena de tu alma... Tu hijo ya tiene la estrella a su lado. Emotivo poema que cobrará valor con el paso del tiempo Karpa
"y luego al volver de madrugada
trayendo en mi frente tu beso
esperaré por la mejor de tus sonrisas
que ilumine mi camino de regreso"
gracias por este texto lleno de amor lo mismo hare yo esperare hasta que Dios quiera. mis***** para tu dulce corazón amiga besossss nilda nilda
07-08-2005
Que pureza sale de tu interior , pues demuestras un gran sentimiento ante todo y es grandioso, me gusto mucho. kitaro
05-08-2005
De hermoso para arriba hasta llegar al sol. Tu camino ya esta iluminado, por la claridad e tanto amor desplegado hacia ese hijo que eguramente en su almohada encontraras en cada despertar. Amor sublime. Mis ***** estrellas. Felicitaciones por tanto amor en tu escritura. chilicote
(5 votos)