y sí !
he desarrollado una atracción casi enfermiza hacia tus abrazos.
Pero no cualquier abrazo
sino de esos en los que me apretás tan fuerte
que siento la fragilidad de mis huesos de forma tangible
tan fuerte que pareciera que mis pulmones no alcanzan a captar el aire que se me escapa a borbotones
tan pero tan fuerte que no hay músculo que me obedezca ni reflejo que reaccione !

y por un segundo,
me siento desvanecer.
Perfecta milésima en que mi mente se nubla
mis reflejos se entucemen, y quedo a la deriva.
Es en aquel instante en el que sólo puedo pensar que morir en tus brazos sería el final brillante que esta historia se ha ganado.



Extingirme a su lado?