De nuevo tu,
De nuevo tu en mi mente, apareciéndote en los momentos felices de mi libertad.
Has llegado en el momento mas inoportuno, pero que importa ya.
Me lamento en vano, pues tu has vuelto y prácticamente nada de lo que haga te podrá alejar.
¿Cómo fue que te eche de mi la ultima vez? O mas bien como podré acostumbrarme a ti, pues parece que estarás aquí un tiempo.
¿Cuánto tiempo permanecerás? Te quedaras hasta que por fin veas mi ultimo suspiro, o hasta que hayas desecho mi vida por completo.
Por que vienes me pregunto, es de tu fascinación el verme sufrir por tu regreso, o tal vez no encontraste mejor victima para tus fechorías.
¿Qué pasará conmigo ahora, podré proseguir con mi vida o tendré que resignarme a lo que tu hagas conmigo?
Simplemente te atravesaste otra vez.
Yo que llevaba una vida olvidándote, tratando de aparentar que nunca estuviste conmigo, hoy solo puedo imaginar las consecuencias de tu llegada.
¿Qué sientes al volver?, ¿eso te hace ser algo mejor de lo que eres?
Mi vida era otra antes de conocerte o mejor dicho antes de que tu me encontraras.
Recuerdo el día en que llegaste, de nuevo era un día muy inoportuno, pero que mas te dio entraste sigilosa y lentamente, parecía que ya tenias planeado y que esperabas el momento preciso para entrar a mi vida, tal vez no importa cuando o como me hallaste, sino lo que me hiciste y eso es lo que lamento.
Cambie por ti, me decían en el colegio que a todos les pasa, pero me rehusaba a creer, hasta que finalmente lo viví.
Lograste en mi lo que muchas personas no pudieron hacer. Todavía no comprendo como, pero te lograste introducir en mi ser.
Se que muchas veces te corrí de mi, pero algo siempre se quedaba ahí, esperando el día en que volvieras y que tu pudieras estar completa y lograr lo que sea que quieras lograr entrando y penetrando mis entrañas.
Sentado aquí, en el oscuro rincón de mi entendimiento, logro comprender como fue que te metiste, yo te traje hasta aquí, yo mismo fui el culpable de que regresaras o mas bien yo fui el que te creo desde un principio.
Ya recuerdo bien, fue justo aquí en este mismo lugar, un día gris como este, rodeado de personas insulsas como las que estoy viendo en estos momentos, yo te traje, yo te invite a venir, tu no desaprovechaste la oportunidad de envolverme en tus sombras, de desgarrarme el alma, mutilarme el corazón.
Se que yo también participe, pero el Creador sabe que luche contra ti.
Ahora estoy aquí de nuevo tratando de pensar como me voy a alejar de ti.
¡Soledad veta ya!
¡Déjame con la compañía de mi ser, aléjate de una vez por todas! ¡Quita tus garras de mi corazón, aleja tus alas de odio, quita de mi tu cuerpo punzante, libérame de la angustia de tu ser!
Y de nuevo todo en silencio, después de una lucha sin vencedor, todo en calma, pero se que esta ahí, tal vez no la pueda ver, pero la siento, siento las llamas de la tristeza, veo el oscuro de la depresión.
Y todo vuelve a la normalidad, ella ahí siempre ahí, yo tomando una copa de vino pensando en que vendrá después de eso.
Un cuchillo afilado o una bala en el corazón ¿que será mejor para liberarme de ella?