ADIÓS.


Si tuviera alas
volaría.
Si tuviera voz
te cantaría.

Por tu amor
que no daría.
Por favor
no me lo digas.

Estas son para ti
y son todo de mí,
pero aquí solo
te digo :
“Con un susurro
caigo tendido”

No me quieres
yo lo sé.
Pero aquí estaré,
esperando un
sueño lindo
que nunca viviré.


Por esto
me despido
y me quitó este dolor
por no estar Contigo.

Mil puñales me estoy
dando, pero a ti
te estoy amando
aunque no me quieras
siempre estaré,
y desde aquí “El cielo”
te cuidaré.

Mi amor, amor, amor
cerrando mis ojos
te digo adiós.

Y en mi último susurro
yo solo te digo :
“siempre te recordaré
y en mi alma te guardaré,
porque nunca he amado tanto
a un ser humano que
me ha hecho tanto,
caer en llanto”.