El grito sono como quejumbre
de un hombre enfermo
la advertencia no basto,
como una rafaga de viento
invadieron mi conciencia
afloraron mi ira
alimentaron mi miedo
Fue un viento de vida
de necesidad por vivir
el hambre en las calles
y la muerte en el aire
en la tierra y en la
contaminacion
Prejuzgaron nuestra agonia
no sabian q nuestra
lucha y supervivencia
era la misma
que el sufrimiento embargaba nuestras venas
como el veneno las de un moribundo
mordisqueando cada celula
aniquilando cada gota de esperanza
Invadieron mi conciencia
y mi dormir
alimentaron mi ira
y necesidad de salir
alimentaron mi miedo
y desconfianza en la oscuridad
Y es que el sol no quiso salir
y es que la inconstante no cambio
pero las estrellas se quedaron
y fueron ellas
nuestra fuente de luz
El viento se llevo todo
y la ventana al mundo se abrio
dejaron salir a los malos
y a nosotros tambien
Texto agregado el 19-06-2005, y leído por 139
visitantes. (2 votos)