NO OFREZCA SI NO VA A VENDER
Paremos con la simpatia!!!
No tanto por uno, que ya esta experto y desengañado en el tema. Exhalo este escrito, mas que nada, por las futuras generaciones, que, imagino, gritarán mi nombre en las plazas del mundo, cuando el problema que desarrollaré ya no exista, gracias a mi, claro.
Hay nenas que cometen una serie de errores, sin que yo perciba con claridad los motivos que los originan, que deben aniquilarse. Los errores a los que me refiero son del tipo: ofrecimientos de e-mail sin que uno se lo pida, agarraditas de hombro sin antecedentes de manoseo, referirse a uno como “negri” o llamarnos por nuestro propio nombre cuando nosotros apenas nos atrevemos a dirigirles la mirada, sonrisitas dulces como la miel cuando nuestras caras son más secas que el desierto del Sahara y nuestras palabras incapaces de generar gesto facial alguno, etc.. Si bien no tengo bien claro el origen y la intención de las chicas de semejantes actos, se de modo irrevocable los efectos que tienen en la raza masculina. Por no parar la inescrupulosidad o ingenuidad de estas minas ha habido innumerables intentos de suicidio, suicidios, emigraciones, cachetazos, accidentes, asesinatos, papelones y, lo que es peor, falsas ilusiones.
Mi proposito es lograr que se termine con esto, si es posible en las proximas horas, como para que este suceso no favorezca solo a futuras generaciones, como ya lo dije, sino a mi también, si puede ser. Si hay que modificar o engordar la legislación nacional, si hay que utilizar el sistema educativo o la violencia, si hay que matar o algo, se hará.
Qué es eso de andar derrochando hospitalidades de semejante calaña!!! Debieran, estas pecadoras, aprender de uno cuyas sutilezas y atribuciones no partirían sino por exclusiva causa del amor. Por desgracia existe en abundancia esa clase de personas a las que las caracteriza la simpatía, el carisma, confundiéndonos, a nosotros, los machos, y tornando imperceptible si tal simpatía es hija del agrado que hemos cultivado en ellas o del cínico simpatiquismo que poseen. Hay que hacer respetar nuestra básica, simple e innata regla que refiere lo siguiente “La brevedad y sequedad de nuestras palabras y gestos es inversamente proporcional al potencial de la belleza que se nos pare delante”.
Según mi suplica, el Estado deberia, con suma urgencia, intervenir con un amable decreto en este asunto, imponiendo el cumplimiento de nuestra indefendible regla que ajusta la simpatía al amor, determinando crudos castigos para quienes la violen. Con el solicitado decreto, aquellas chicas que sonrian mirando a los ojos a algún caballero o haciendose las lindas, aquellas que toquen los hombros u otra parte del cuerpo del varón, aquellas que pidan u ofrezcan mails, direcciones o telefonos a un hombre ( desde los 13 años) o a en voz alta a otra mina, deberán corresponder, con el mayor de los gustos y con inmediatez absoluta, los pedidos del hombre, ya sean estos, de casamiento, de mates ( la mujer tiene el derecho de optar entre dulces o amargos), de inocentes besos, de asquerosos mimos, etc.. Y no sería esto autoritarismo ni mucho menos, simplemente un mundo sincero en el que se corresponden los sentimientos de aquellas que seducen con los seducidos. En este mundo de pureza se deduce que la accion de seducir de una mina, de cualquiera de los modos ya expuestos o de otros, no posee otra intención que no sea la de estar con ese tipo. La que sonríe dulcemente, quiere. Y pronto sera ley. Ojo por ojo es lo que propongo, si ellas violan la ley, que sean castigadas con lo mismo que le hicieron a la ley. Disculpen si me sobrepase un poco, es que en este instante, millones de falsas ilusiones estan pariendo.
En este asunto, adhiero firmemente al positivismo. Según S, B. Tres muiltiplicado por dos es igual a seis. ¿¿Tan dificil es ??. Nada de femeninos subjetivismos, basta de malas masculinas interpretaciones. No existen estas malas interpretaciones masculinas, acusadas por las minas. Lo que si existe es una diferencia, notoria hasta el mango, entre el manejo responsable, cientifico y criterioso del hombre, y el “viva la pepa, total yo no enamoro” que tan bien dominan las señoritas, si es que les cabe tal concepto. Alcancemos el simple y conveniente día en que cada contacto con una dama, sea visual, verbal o carnal, refleje claramente las intenciones de ella para con nosotros. En ese contacto, cruce o diálogo, sabremos a los 2 o 3 segundos de su inicio, la probabilidad de enredaremos con esa mina. No habrá lugar a confusiones ni desamores. Al menos, cuando haya que molerse a palos, en algun boliche, con el novio de nuestra reciente chica, sabremos que ella recompensará con algún beso nuestra batalla, perdida o no. En cambio, sabemos que si hoy ocurre ese intenso encuentro, en ese boliche, con ese novio, la mina no solo que no gratificará nuestro esfuerzo, sino que nos acusará de haberlas toqueteado, y seguramente colabore con el novio pegandonos alguna patadita.
El camino de la honestidad es el que invitamos, si es que quieren invitar conmigo, a las damas a recorrer. Sinceridad. Basta de mentiras. ¿Es mucho pedir ?
FIN
|