Esa obsesión por ser otra, me trae y me lleva
Adicta a lo que respiro, cada huella me pisa la cara
Confiada en lo que era
Ya las memorias caen a la copa de vino
Alucinando… locas
No pueden levantarse
Todo me da vueltas
Conozco el abismo,
He caído cientos de veces
Pero me ahoga la altura
Nunca podré pisar el cielo en vida
Mi querida estrella fugaz
Lleva lo último que tengo de niña
Un par de lágrimas hacen malabares
Entre lo frenético y lo onírico
La magia pierde sentido
Nunca tuvo filosofía
Uso un traje ridículo
Y el espejo me mira en silencio
Nadie quiere decirme
Si era lo que fui cuando creo ser quien soy
Eso tan absorvente y fúnebre
Un puñado de colores ensucian mi rostro
Termino gritando
Si estas líneas tuvieran eco
Alcanzarían todos los libros
Y opacarían
El lamento del universo.