Pisadas de tacón.
¡Por fin llego!

Con que trabajando, la amare mucho pero, esa no me la creo.

Haber, que explicación me da ahora.
El reloj marcan las una y media de la madrugada.
Como mi mujer, va estar en la calle a estas horas, ¡que se cree!.

La respeto, la mantengo, le soy fiel y así me paga, poniéndome cuernos.

Claro como creía, que estaba de viaje.


¡Ah!
Haber que excusa tonta se inventa ahora.
Me voy hacer el dormido, haber en que estado llega.

Y como actúa frente a mi presencia.

A mi madre ya me decía,” esa mujer, solo se casa contigo, por interés”.
Pero, yo ¡embobado!

Es que era tan bella, aun lo es.
Por algo, le pago
el gimnasio, las cremas, la peluquería, etc de sus vanidades.

De haber, sabido, todo lo que me iba, costar mantenerla, ni loco me casaba.
Para tal caso, si quería compañía, me hubiera comprado un perro.
El si es fiel, no como la libertina de mi esposa.

¡Ah! pero va ver, la acusare por adulterio.
la dejare en la calle, haber si, su amante de turno quiere, cargar con ella.


De pronto..

ella entra, prende la luz, ve a su esposo acostado

Y le pregunta:

¿qué haces aquí no te ibas de viaje?

El refunfuñe, diciendo

¡que pasa !, ¿por que me levantas?

Como quieres que no, me enoje, me haces ir sola.
al aniversario de mis padres, diciéndome que te salió un viaje de ultima hora.
Ahora llego y te encuentro, bien dormidote, roncando en la cama.

el marido en silencio piensa..(eso es malo cuando uno miente, a veces uno termina creyéndose la mentira)

....ni modo, el sofá no es, tan incomodo....