te encontré donde nunca te busqué
donde el sabio pailamún con un solo gesto
me indicó el lugar perdido
entre selvas y metrópolis
y mi me confundí...
pailamun reía al ver mis equivocaciones,
guerreros y elfos se cruzaron por mi travesía
cada uno de ellos me entrego luz
pero no la suficiente
como para bañarme en el río de la felicidad.
un día me acerqué al río
y en él mi reflejo me observé
a mi lado no había una mariposa
si no mi guerrero perdido.