Aquel día llegó a mi corazón una dulce música
Y de vez en cuando se asoma al balcón de mi alma
Es de cadencia dulce, te acompaña,
Acompasada con el sonido del corazón
Esa música serena se mezcla con los sonidos del aleteo
de ángeles hermosos que me invitan a volar con ellos.
Desde su azul cúpula limpian el aire del dolor de mi alma
Pero…no la recuerdo
La he buscado en los más profundos huecos de mi corazón
Se que anída en mi alma pero no puedo acceder a ella
Todas las mañanas recibo al sol con la esperanza de que ella vuelva
Y cuando él se oculta le rindo pleitesía a la noche para que la busque
Se que algún día en cualquier lugar, de cualquier esquina
Ella llegará sin avisar, será una brisa, un suspiro o un dulce mirar
Vendrá envuelta en el viento y como siempre…sin avisar.
Texto agregado el 11-06-2005, y leído por 122
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