Esta noche intentare arrancarte de mi pecho, aunque la luna no esté de acuerdo con mi decisión….

Y recordé que en el otoño una estrella nos sorprendió escondidos de la luna, tras los arboles color marrón, jugando a ser uno solo tu y yo.

Esta noche intentare borrarte de mi mente, aunque el cielo reniegue mi necedad…

Y en el intento recordé que en primavera una cálida llovizna nos cobijo, mientras los arajos envidiosos silenciaban al ruiseñor, cuando el lago era el espejo de nuestra ilusión.


Esta noche intentare ahogarte en el fondo de mi alma, aunque esa estrella se apague entristecida por mi terquedad…

Pero recordé que en el invierno, mientras la nieve blanqueaba al mundo, mi único refugio fueron tus brazos; tus caricias mi calor; tus besos mi alimento y tus ojos mi más hermosa tentación.

Esta noche intentare matar tu recuerdo, aunque las nubes huyan asustadas por esa barbaridad...

Y sin querer recordé que en verano el sol doraba tu piel, mientras el mar celoso golpeaba a las rocas, cuando las gaviotas bailaban a nuestro alrededor.


Y con la llegada del amanecer me di cuenta de que yo no podía dejarte pues eres tu mi hermoso pasado y lo que mantiene mi presente aunque en mi futuro no te pueda ver.

Pero llegara aquel día en que también me toque partir y volveré a tus brazos a sentir tus besos y volveré a creer que lo nuestro es eterno…