Despierta el dia en sus pupilas, su incansable sinsabor de noches perdidas me entrega su total ambición de ganas de amar....
Mi saldo da negativo, mis dias ya no mueren, la nocion del tiempo se ha perdido en un enjambre de ilusiones paridas dentro de un mismo sueño, casi de la misma persona, que entrega sus cuotas de afecto en souvenires de cotillon...
Casi nos encontramos aquella vez, pero las casualidades existen y las maldiciones de las brujas se cumplen cuando no sabemos quien es aquel que nos mira desde atrás...
Ni siquiera habia guita de por medio, un par de estrellas que desangramos en rocanroles de otro tiempo sirvieron de balsamo a besos de presos, que pueden desatar su locura solo cuando el amo duerme...
Pero la ficha ya cayo, las canciones tienen un final y no hay mejor vino que aquel que hemos sabido disfrutar, la misma noche que la lluvia termino con nuestra poesia haciendo nacer otras casualidades, de realidades cuyos prinicipios sin final aun rondan al final de los callejones, donde los peores buscan consolar sus sueños y los mejores se acuestan con una botella vacia al lado....