Entre sueños me encontré
Creo estar encerrado entre cuatro paredes y no oigo nada, no tengo hambre ni sed. Intento ver las paredes que creo me encierran pero no lo consigo, dudo si estoy encerrado o no, no lo se con certeza, no consigo ver nada, voy a la derecha, nada, a la izquierda, nada. ¿estaré soñando?
Creo que estoy soñando, parece que controlo y eso me divierte. Voy a pensar que soy un bombero, .... y .......¡allí que voy!..., parece un derrumbe, me lanzo raudamente y, gracias a mi valentía, salvo a un niño que jugaba en los bajos de la finca y que quedó atrapado en el hueco de la escalera junto a su mascota “Puky”. Ahora si que estoy seguro de estar soñando.
Ahora voy a por el Hombre Araña, fiuummm, fiuummm, a por Torre Picasso, a por Torre Europa, jo, tio...¡Cómo mola el Santiago Bernabeu desde arriba!....Pero hay algo que esta mal, ¿dónde está el tercer anfiteatro?. ¡Como flipa! Soy capaz de viajar en el tiempo, la cosa me esta gustando.....Tengo sueño, pero es imposible que sea así ya que estoy soñando. Solo sería posible tener sueño a menos que sueñe que tengo sueño, ¡Jo, que sueño me da pensar!. Me duele la cabeza, me dejo llevar, ¡no, no!, eso no quiero soñar. Intento orientarme hacia cosas positivas y se mezclan pensamientos lúgubres y deprimentes con imágenes claras y alegres. Intento poner la mente en blanco, el dolor me puede, siento que me voy a desmayar. ¡Que golpe me he dado contra el suelo!, si no llego a estar soñando me mato o al menos me hubiera hecho un daño descomunal. ¿Cómo me he podido ver caer?, no lo sé, me rindo, el dolor aumenta con cada pensamiento.
Del golpe anterior salto a estar en un bar bebiendo ron a todo meter, el efecto del alcohol me puede y no consigo ver bien. ¡Que resacón!, me parece que el portero del bar me saca por la puerta grande (el símil vale, ya que me he bebido 3 botellas al tirón y sin pestañear, lo extraño es que yo no bebo), me deja en un taxi que me lleva a mi casa. ¡Menuda casa tengo!, me salen a recibir los perros......y nadie mas. Otra vez los pensamientos sombríos, me vuelve a doler la cabeza. Decido dejar de soñar.....
¡Uff...! creo que vuelvo a la extraña normalidad, el dolor se ha ido y acabo de soñar que despierto en mi sueño. Aunque resulte un contrasentido eso parece.
- Señor, señor, ¿Está perdido?
Escucho una voz, ¿De dónde sale?, esto es nuevo para mi, voy a explorar este nuevo sueño.
- De aquí arriba.
¿De dónde?. No veo nada. ¿Dónde es arriba?
- Aquí, si no me ve no se preocupe, estoy acostumbrada.
No la veo pero su voz me reconforta, dejo correr el sueño y decido prestarle atención a ver si me da pistas sobre lo que me pasa.
- Mire Usted, tengo un mensaje del otro lado que, aunque no es urgente, parece importante. Se trata de su conciencia que dice que ya le vale andar por ahí zascandileando y que va siendo hora de volver.
No entiendo el mensaje onírico e intento contestar pero no tengo voz. ¡Date!, va a ser un sueño persecutorio. Me concentro en cambiarlo pero la voz prosigue.
- Lo puede intentar pero no le va a funcionar el mensaje es directo, exclusivo y vinculante ¿sabe Ud?. Así que mi consejo es que se aplique y obedezca, si no las cosas se van a poner peor de lo que están.
Me vuelvo a concentrar y ahora estoy en la carretera con un cochazo increíble aparcado en el arcén junto a un número de la Guardia Civil que me quiere retirar el carné por exceso de velocidad. Pero ¡como puede ser esto si solo iba a 90 Km/h!, ¡Que mala suerte!. Otra vez me viene el dolor, ahora es una punzada tremenda en alguna parte que no se precisar. Creo que me voy a desmayar, este dolor no se puede aguantar, no es humano.
- ¿Señor, Señor, me oye?
- Si le oigo, fuerte y claro, demasiado claro diría yo. - Le contesto un poco molesto ya que estaba soñando algo que no consigo recordar.
- Me alegra que ya pueda hablar. Le traigo un mensaje del otro lado, que dice que tiene que volver inmediatamente.
- ¿Adonde tengo que volver? – contesto con tono de fastidio
- A la normalidad, hombre, a la normalidad. No sea tan testarudo y desista, que mucha gente depende de Ud., ¿no se acuerda?
- ¿Qué es lo que tengo que recordar?
- ¡Que tiene a su familia esperándole, hombre de Dios!
La revelación me estalla en la cabeza, todo cobra un sentido inesperado, que, sin hacerse consciente, activa mi voluntad y deseos de saber mas.
- Oiga, oiga - le digo a la voz
- Si, si, le oigo, sigo aquí.
- ¿Usted me podría ayudar a volver a casa? – le pregunto dejando entrever mi inquietud por la respuesta.
- Si, pero depende de Ud, de su voluntad de volver. ¿Ud. quiere volver?
- Creo que si, aunque aún tengo la sensación de estar perdido y camino de ningún sitio – Le confieso con cierto reparo a la voz.
- Tranquilo, es normal, ya era hora de que espabilase – me responde.
- Entonces,...... ¿me va a ayudar?
- Por supuesto...., ve Ud. aquella luz blanca, no, no, hacia el otro lado – me dice corrigiéndome la dirección.
- Si, si, la veo...
- Pues, ese es el camino a casa.
- No sabe cuanto le agradezco, Adiós, ya nos veremos.- le replico a modo de despedida
- Gracias a Ud., no sabe el peso que me quita de encima, ya nos veremos puede estar seguro.
Me dirijo hacia la luz con mucho esfuerzo, parece que el cuerpo me empieza a pesar, el cansancio me va pudiendo y me cuesta mucho avanzar hacia la luz. Comienzo a ver imágenes que se van sucediendo delante y aldededor de mi. Comienzo a sentir dolor físico, en las imágenes aparece la Guardia Civil, luego los bomberos, los servicios médicos, una ambulancia, un pasillo lleno de luces a intervalos regulares, una gran luz me ciega.......parece el final.....
Abro los ojos y mi conciencia toma el control, he vuelto. Veo a mi mujer y a mi hijo a los pies de la cama. El dolor me puede......ahora si que puedo dormir y ....soñar.
“Esta mañana ha recuperado la conciencia el conductor que hace un mes fue embestido junto con su familia por un turismo que circulaba en sentido contrario por la M-30 de Madrid y cuyo conductor presentaba un avanzado estado de embriaguez. Recordamos que el conductor suicida murió en el acto, mientras que la familia del conductor, hoy recuperado, resultó con heridas leves gracias a que el conductor evitó la colisión frontal. Los bomberos debieron rescatar a la familia de entre los amasijos de hierro en los que quedó convertido el vehículo. Se espera que el conductor se recupere de sus graves heridas y que pueda salir del hospital en 3 ó 4 meses”
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