lágrimas


Las madrugadas se han convertido
en melancolia y música que me hace recordar,
en vacíos cubiertos de llanto,
en lágrimas y más lágrimas.

Éstas madrugadas de soledad
me hacen descubrime débil,
sólo me percibo como la mujer
que llora y moquea sin parar.

Éstas lágrimas se escurren
por todo mi rostro.
no, no se contienen
las siento cálidas
pero son frias.

He querido terminar con ellas,
se han instalado en mi garganta
he tomado agua para hacer que regresen,
pero no quieren, se resisten,
quieren salir al exterior,
complotean en mi contra
y sonríen porque han vencido.



ISABEL MERINO