Al final cada corazón es diferente; ¡Tan irracional! Por eso sueño con caracoles que se arrastran, En una fila sin final y no se que hacer. Siento que hay peligro al voltear a verte, Las plantas se tornan naranja Mis ojos también. Hoy es el noveno día de seguir nadando, Completamente ebrio. La luz me ciega en tu pelo. La gente desaparece con el fuerte sol. Hay momentos de compasión, luego los acuso de asesinato y me duermo.
Texto agregado el 18-05-2005, y leído por 133 visitantes. (1 voto)