Carcajadas siniestras escuche al levantar mi mirada, solo veía las nubes, sentía el goteo de tus ojos, pero no los veía, no los veía, en algún lado estabas, buscándome, acechando, tus fríos pensamientos casi helaban el aire que respiraba, avance rápidamente, no podía dejar que me alcanzaras, yo no era tuyo, pero tu si fuiste mío. La niebla comenzó a caer, pero no podía anular mi atención en tus movimientos, no podía cambiar la atención dedicada a ti por brindarle un poco de atención a la fuerza primigenia ...por que no podía hacerlo? Por que?... el acero de la luna brillaba, casi tocando el horizonte, dejándome, olvidándome, recordando que yo lo olvide. La danza incesante no terminaba jamás, mis ojos huían en lejanas furias, buscando, gritando tu nombre para que aparecieras y segaras la niebla, pero mi corazón no podría resistir tu presencia...dolorosa? ...en algún lado tu aliento formaba ecos sobre los ventanales de las casas, pero ahora esos ecos no están, ya no hay casas, solo estas tu, escondido en la nada...la nada se esconde en ti...ofréceme tu mano y la tomare, como un niño te seguiré, pues así te conocí, así me perteneciste, ofreciste tu mano y fue mía, mi tesoro. La dualidad de mi desesperación desespera mi dualidad, yo no quiero que te vallas, se que me buscas, que tu tampoco quieres dejarme, pero no puedes estar cerca, no puede tu mortecina mano tocar mi espalda...deja de gotear miradas en mi...corro, el paso rápido ya no es suficiente, ya puedo sentir tu jadeante desear, viene desde el todo, viene desde mi, solo soy yo que veo mi desesperación reflejada en un espejo. Detengo el paso, solo puedo enfrentarte, volverte mi parte, volverme tu parte, maldito el día en que te llame, en que como un padre te sentí, en que como un amigo te trate...el día en que como yo mismo te reconocí...solo las sombras del sol pueden opacar los deseos que quedaron girando en mi cabeza, aléjate!, aléjate!, este es el fin de mi camino, solo se que empezó en tus ojos y termino en los míos