Hize un viaje donde no había boleto de regreso, aun quebrando las alas supe donde esta la percepción que me decía que estaba hay en la paradise de un mundo feliz…
Sentí perder el conocimiento del lado obscuro de la mente, del mundo religioso, de multitudes, culturas, rituales. Entonces entendí a dios, entendí lo que habla, entendí su dialecto, su religión, su cultura, su sexo hermafrodita y entendí su mente ilegible, le llame por su nombre no por su sabiduría, nos acostamos en el húmedo perihielo. Bienvenido seas a la fullería de tu viaje, donde tu poesía será escuchada para cuando ya no regreses.
No estaba en donde tú crees que estoy, No en el cielo, no en el infierno… ni a donde quieres ir, al eterno paraíso. Estoy con dios dentro de un pan a donde tu no quieres entrar, es la poesía que no quieres escuchar, las letras tabú que no quieres leer.
Cuando proyecte mis ojos en esa deficiencia, dios y yo fuimos uno mismo bebiendo las mismas nubes. La monomanía no se me dio porque perdí mi esquizofrenia alucinante, perdí mi boleto donde no había regreso…