JUECECILLOS

Lo único que queremos es
¡Juzgar!
No importa si hay condena, no importa si hay paga
Sólo el hecho de ser jueces
Creyentes plebeyos del infierno

Somos representantes de representaciones morales
Y así somos mas que el hombre

¡Miserable mortal!

Estas bajo mi tutela mental
¡Nosotros! Diremos quien y que eres
Y nosotros seremos solemnes y sobrios
En nuestras tajantes palabras y objeciones
Nuestro pensamiento mutado en lenguaje los abominara.

Comparados con dioses, nuestra espectral voluntad
Estarán bajo el yugo metafísico de nuestra deidad

No importa el resultado, sino la comedia
¡Festejemos!
Las hermosas condenas del raciocinio
Al matadero todo sastre moral
No se preocupen
Nosotros haremos lo necesario.

Dividamos el mundo, la desigualdad es nuestro fin
Indigentes culturales, festejemos el circo mortuoso de la ley.
Ordenaremos las orgías sistemáticas en nuestras
cárceles.
EL ORDEN es nuestro juego, Todos
categóricamente en su sitio

VAYAMOS LA PLAZA, que siempre algún imbesil
será descabezado, en nuestro altar, frente a nuestra bandera,
religión y moral.
Dios quizás lo quiso así, pero eso es lo de menos
Nosotros no queremos ser mortales.
Si no que queremos hacer mortales a los demás.

Dividamos todo en dos, que es nuestra ebria conveniencia:
Bien y mal, razón y cuerpo, verdad y falsedad, inmutabilidad y devenir,
Moral e inmoral.

Estos son nuestros bandos, y entre nosotros nos dividimos
En dos para jugar a la justicia
Nuestra fastuosa razón hace de nuestro divertimento el divertimento
Del el vulgo
Vayamos a la salida de todo para poder seguir
Con este teatrillo.
Nosotros decidiremos quien esta de cada lado,

Pero todos, absolutamente todos, entran en el gran carnaval
de la estupidez legalizada. Pero por favor déjennos juzgar.