Un vacío sin retorno Era con mucha sombra y grande soledad. Macedonio Fernández La desazón nos invadía sin reparo. Las palabras me ahogaban Inoportunas. Ella escapaba a su pesar. Yo alucinada detenerla. Me aferraba a una mano que no podía reconocerme. Estábamos solas /ella y yo/ Estaban solos /él y ella/ Nos quedamos solos: Él y yo. Febrero 2004 Silvia Haydeé García
Texto agregado el 14-05-2005, y leído por 166 visitantes. (3 votos)