Hernán es un tipo exitoso, o al menos lo es hasta ahora, se levanta cada mañana contento, si tan sólo usted viera el gesto de su rostro en el espejo, cuando él termina de cepillarse los dientes, pensaría, sin duda alguna, que un público de pie y enardecido le aplaude a través del cristal...

Trabaja, hace bastante tiempo, en un lugar que no mencionaremos, pero lo hace junto a su señora y son bastante eficientes, hace no mucho tiempo se incorporó a la empresa una jovencita de 23 años, recién llegada a esta pequeña ciudad y se desempeña como... a ver, ¿cómo llamarle? ¿Asistente?, Sí, puede decirse eso, Marla es bella, ya lo comprobarán ustedes mismos, una fierecita pero bella al fin y Hernán, el tipo que está sacando copias, ¡sí, ese mismo! , Le dobla la edad, pero también le dobla la mirada, cogote y torso cuando ella pasa por su lado, ¿ya lo imaginan? ¡Correcto! Hernán se enredó en las piernas de Marla desde el tercer día que la vio, pero Hernán es bastante atractivo y fue del completo gusto de ella también, no pensemos que es un acosador, No señores.

La aventura, mejor dicho, este “sueño del pibe”, ha durado varios meses ya, Marla está al tanto del matrimonio celebrado hace años y parece no inquietarla, pues, y he aquí la desgracia, Hernán le ha comentado lo mal que va su matrimonio, las pocas ganas, la poca comprensión, la poca “intimidad” y todas las pocas cosas que le afectan a un hombre (o mujer) casado frente a la posibilidad de catre ajeno. Después de todo, la mujer de Hernán, parece ignorar a Marla por completo, incluso la evita todo el tiempo, Cancha Libre.

Ahora guardemos silencio, el teléfono de Hernán suena... vaya! Es Ella!...


-No me has llamado en dos días... ¿Qué mierda pasa contigo, Hernán?

-Nada, princesa, exceso de trabajo -Yo trabajo contigo, ¿Se te olvida? Y no te he visto tan ocupado... Estoy harta de que me ignores así, ¿O ya no me quieres?

-No me jodas, tú sabes mi situación en el trabajo...

-¿Qué? Tu mujer no ve porque no quiere ver... bastante tarada es...

-Después hablamos, mejor, andas histérica estos días, ¿Sangre?

-No seas gracioso que te sale medio imbécil

-Jejeje... le acerté, bueno, ¿qué quieres? ¿Tiene algún otro fin esta llamada?

-A ver, veamos, ¿Qué tienes planeado para nuestro 14 de febrero?

-Nada, tú sabes que tengo que cenar con mi mujer, no seas hinchapelotas... ¿OK?

-Ahhh... bueno, yo tengo planes en todo caso y son CONTIGO.


El sonido del aurícular al chocar contra el resto del teléfono fue seco, como podemos apreciar se le fue del oído a la espina dorsal y le bajó como un chorro de agua fría por la espalda... algo anda mal, ese CONTIGO no puede ser nada bueno... Hernán mira el calendario, 12 de febrero...

Empieza a recordar y bueno, Marla es un sueño, se llevan divino, aunque a veces ella es explosiva y la mejor cena la convierte en telenovela mexicana, tienen excelente sexo y cumplen sus fantasías como quien le cumple mandas a Eros, y es joven (lo mejor de todo), definitivamente se merece algo para el día del amor... cualquiera sea el tipo amor, así, el 14 será domingo, su señora irá a visitar a su madre por el día completo y el tendrá tiempo de hacer algo, con ella, en su ausencia...

Retrocedamos un poco, por favor, Hernán va a reclinarse en el sillón, pues se quitó un peso de encima, perfecto, ahora va a subir los pies al escritorio, dejemos esta sala y veamos qué pasa con Marla... está en su casa, y está dormida, ¿habrá llorado luego de la conversación?... da la impresión, todos los recuerdos y regalitos de él están junto a ella en la cama... también los videos, la lencería... bueno, se debe haber tomado un trago también, es su día libre, el sábado irá al gimnasio en la tarde y el domingo celebrará...

El día sábado fue de compras y reservas para dos citas, en el caso de Hernán, más tarde la llamaría (a Marla) y la citaría para el domingo, lo de su señora era más sencillo de planear, lo mismo del año pasado. Pero Marla ha cancelado la ida al gimnasio, veamos qué hace ella...

Todo está perfecto y ordenado sobre la cama, un vestido divino, totalmente ajustable a sus moldeados y firmes 23 años, el perfume que llevará, los tacones, la cartera, ¿Las cintas de video?

Apaguen los teléfonos celulares, por favor, ahh no... es el de ella, ¿y dónde diablos lo dejó?... ¿en el baño?, estupendo, lo tiene...


-¿Princesa? ¿Mejor ánimo? mañana a las 6 te paso a buscar... pensé mucho y te lo mereces, linda, no andes enojada...

-Yo también te tengo una sorpresa, amorcito, voy a terminar de hacerte feliz

-Bueno, ¡Qué alivio!, pensé que estabas enojada con este pobre ser...

-No podría, no ahora

-Andas misteriosa, pero mañana te lo quito...

-Mañana será, besos

-Besos


Definitivamente esto de la muchacha es malo, pero la intuición de Hernán es mucho peor... sólo nos queda esperar.


Seis de la tarde, con flores en mano nuestro galán toca a la puerta, nada, segundo intento, nada, le aumenta el ritmo cardíaco, llámala...


-Estoy en tu casa y no estás... ¿Qué pasa? ¿Porqué no me esperaste? ¿Dónde mierda estás, pendeja?

-En la tuya, tarado...


¡Mierda!... sus llaves, velador, dormido, comprar pan fresco, ¡¡copias!! Todo este desfile pasó por su mente, saboreado por una maquiavélica y silenciosa Marla que sonríe al otro lado de la línea...


-¡No es gracioso! ¡Te voy a buscar de inmediato!

-MMmmmm... de que vienes, te vienes, pero no vamos a ningún lado... vamos a celebrar en tu casa, tengo todo listo.

-¡Escúchame esto! Si me jodes, te voy a sacar de las greñas, así que mejor me esperas afuera y te dura el peinado

-Escúchame esto tú, tengo cena y tragos para esperar a tu señora, ésta noche le cuentas lo nuestro, amorcito.


Estrangulando las flores, corre escaleras abajo, toma el carro, y se va ciego, desesperado, con ese “amorcito” y la risita de Marla resonando... llegará en una media hora o cuarenta minutos, semáforo, luz roja, peatones, más peatones, verde, camión atravesado, roja de nuevo, ni siquiera ha notado que lleva aún las flores en la mano, una mujer le sonríe del carro de al lado, seguro también es puta... verde, seguimos...


Cuarenta minutos, al fin, entra con el rostro desfigurado, Ella está sentada en el sofá frente al televisor... mejor apeguémonos a la pared, puede que vuelen cosas...

-¡Mira, hija de puta!...

-¡¡Shhhh... no grites así! ¡En cualquier rato llega tu señora y nos va a hallar discutiendo, va a pensar que nos llevamos mal, cariño!

-¡¡Ven acá, malparida!!...

-Lo de malparida ni me importa, pero no me toques, y si lo haces, tomo el teléfono, ya sea acá o en el hospital y hago UNA LLAMADA y mañana temprano aparece un regalo en la casilla de correo de tu señora... ¿Qué te parece? ¿Ah?... ¿le cuentas tú o yo?

-Estás loca, ya vamos, salgamos de acá, princesa... por favor...


Marla se levanta del sofá, radiante, y Hernán se desploma en el mismo, acabado, ella avanza al televisor, lo prende y pone el video, y comienza un recital de gemidos, jadeos y palabras irrepetibles... las imágenes... ¿Qué podemos decir? A todo color, buen encuadre por lo demás...


-Tú sabes que no soy la mejor explicando, así que traje apoyo audiovisual, ¿ves? Una versión editada y de lujo de nuestros mejores “momentos”... ¿la quieres ver completa?

-No, déjalo así, apágalo...

-Si le cuentas tú o yo, el video se lo muestro de todas maneras, fue mucho trabajo editarlo... además hay tres videos, uno en caso de algo salga mal se enviará a la casilla de tu mujer, el segundo está en mi casa muy tranquilo y éste... bueno, ya sabes...

-Le voy a decir Marla, está bien, pero lo del video es una putada, sin video...

-Veremos...


Él toma la botella de tequila y se encomienda a ella, ojala fuese veneno ¿No, Hernán?... no le dice nada más a Marla, está todo claro, lo cagaron, Ella se levanta a poner algo de música y la canturrea un poco mientras mira los portarretratos de la familia, linda, pero casi siempre las familias son lindas cuando se ven ante tamaña desgracia... en esto, y como si saliese de la foto, la familia se hizo presente, al abrir la puerta Marta se congela (así se llama, señores, no es mal parecida, eh?), Su hija, sólo mira la situación algo extrañada, saluda a su padre y se va a su cuarto, ¡Bendita apatía de la adolescencia!... Hernán ni siquiera está borracho aún, sólo aterrado, Marta también... avanzó un poco y afirmándose en la mesa... dijo:


-No me digas nada, Hernán, yo lo sé hace mucho...


Marla, total, pero no desagradablemente sorprendida esboza una leve sonrisa y se acomoda en el bar, vaso en mano, para disfrutar todo con detalles... él sólo logra decir:


-¡¡Marta, escúchame...!!

-¡No, tú óyeme a mí, es mi culpa... tenía miedo...!

-No es tu culpa, yo fui un hijo de puta y debo pagarlo, perdóname...

-Pero eso fue hace mucho, yo no quise decirles nada... pero es cierto, amor, no sé cómo se enteraron pero, sí, es la hija de Josefa, ella es tu hija...


Un silencio inunda la sala y un vaso se cayó al suelo...


Disculpen señores, pero esto no estaba previsto, creo que lo mejor es retirarnos de la sala ¿Cómo que no? ¿Pero qué creen? ¿Qué esto es un circo?