La Muerte y Yo nos encontramos noche a noche
alguno quízá nos quiera acompañar...
es un deseo oscuro que mi mente no soporta,
una señal en mi camino que empalidece,
en medio de ecos vamos de la mano,
dejamos nuestro albedrio de lado
jugamos y hasta quizá nos fundimos,
nos hacemos uno...
buscamos experimentar algo más...
Si nadie está acá por siempre,
a quien le ineteresa cuanto uno
a su hechizo hipnótico pueda escapar.
Mis miedos ya no se hacen cargo de lo que pasa
es algo que seguramente me va a encontrar,
y ella no me deja,
me revuelca en mi cama,
me desvela...
Son miedos solo miedos
pero no los puedo soportar
no más rechazo, no más negación.
Es nuestro tiempo de jugar,
dejenme solo con ella
nuestar función esta por empezar,
sientense todos!!!...
aquí comienza el final...