Vacaciones de verano, estrenar mi coche, ir a Guadalajara.
Eran mis prioridades en ese lejano año de 1970

---Primo que bueno que por fin viniste.

Exclamo mi prima que como toda la hermosa gente “tapatía” te demuestra un gran calor humano, cuando visitas la perla de occidente.

Después de los abrazos y demás muestras de cariño, una invitación.

---Hoy es la fiesta de Claudia, así que olvídate del cansancio y nos vamos de “parranda”

Oye, pero maneje 8 horas, vengo rendido. Trate de explicar.

---Nada... nada a las 9 de la noche nos vamos.

Oiga esto esta muy bueno, ¿que es?

---Ponche de granada. Contestó el mesero

Sírvame otra, pero en un vaso grande, no en esta copa chiquita.

---¿En un vaso grande?

Si en un vaso grande

Dios que me esta pasando, todo se mueve.
¿Pues que tiene el ponche de granada? Pregunte a uno de mis primos.

---Tequila y tómalo con cuidado, pues es muy “pegador”

Si me hubieran advertido antes, pensé, cuando en forma torpe, trataba de salir a la terraza para evitar hacer el ridículo en plena fiesta.

---Ten calma, así como se “sube” rápido también así se pasa su efecto.

Me dijo una cristalina y alegre voz, que sonó a mis espaldas cuando yo sentía que todo mi cuerpo estaba en completo estado gelatinoso y el piso de la terraza giraba a una velocidad endiablada.
Volteé con gran esfuerzo y entre brumas vi la cara mas angelical que se pudiera uno imaginar.

---¿Te sientes muy mal? me pregunto tratando de contener la risa, la aparición celestial.

No, “clado” que no, solo un “pouquiti” “maniado” (claro que no, solo un poco mareado)

---Vi que tomaste tres vasos grandes de ponche, ¿nunca lo habías probado?

Si, peeero..bueno...no
Ja, ja,ja rió encantadoramente la niña de ojos verdes y pelo negro.

¡Reacciona! ponte derecho, acomódate la corbata, sonríe y dile algo gracioso y cautivador a esta bella dama; ordeno mi mente a mi cuerpo...mi cuerpo solo contestó...¿quiiiien yooo?

---Insisto no te preocupes...mira te traje café bien cargado, tómalo despacio y pronto te sentirás bien.

Así lo hice y efectivamente; y todavía no entiendo como una gran mentira universal, sigue siendo usada impunemente. Me refiero a eso de que te “sentirás bien” cuando esta uno en el mundo de las brumas etílicas, todo es suavidad y flota entre nubes. Pero después del café y de unos minutos, efectivamente me sentí sí; pero como araña fumigada, la cabeza estaba en franca rebeldía y trataba de separarse del resto del cuerpo, las piernas tenían ideas políticas diferentes, una era totalmente izquierdista con tendencias maoístas y la otra definitivamente me inclinaba a una rabiosa derecha capitalista, el estomago gritaba ¡ revolución!

Pasaron varios minutos de confusión, en donde yo recitaba hacia mis adentros..la clásica oración mexicana, ¡Dios mío! si con la borrachera te he estado ofendiendo, con la “cruda” me sales debiendo!

---Se te nota, ya otra cara.

¿Se me nota otra cara? ¿Pues que había pasado con la cara que todas las mañanas le decían, que era del tipo mas guapo de México? bueno solo me lo decía mi madre, pero cuenta ¿no?

---Ven siéntate y platiquemos.

Haciendo uso de mis conocimientos de topografía, logre centrar la banca desde donde ella había observado atentamente, mi pesaroso y poco gallardo regreso a este mundo de sufrimientos y angustias.

---¡Ahí no! Me grito; Esa es la maceta con nopales y tienen espinas.

Después de quitarme unas pequeñas espinas del pantalón, que dolorosamente disiparon las ultimas brumas del alcohol, platicamos largamente de mil cosas que nos hizo descubrir lo homogéneos que éramos, lógicamente yo estaba de pie, pues algunas espinas habían logrado pasar el pantalón e impedían que me sentara a su lado.

Estoy en deuda contigo, ¿te podría invitar mañana al lago de Chapala?

---No estas en deuda conmigo, tal vez si tienes una deuda por la maceta, pero eso lo arreglaras con el papá de Claudia y si me gustaría ir contigo a Chapala.

---¿Pues que te paso primo? Me preguntaba Alberto, hijo de mi tío Juan, mientras hábilmente y con unas pinzas sacaba las espinas del hasta antes del penoso accidente, un bello trasero.

Pues conocí a Patricia y es maravillosa, la invite a Chapala.

---¿Patricia la “ojiverde”?

Si... es preciosa y hasta las espinas faltantes de salir, dejaron de molestar al recordar su voz, su risa y sus ojos verdes.

---Uy primo, presiento que vendrás mas seguido a Guadalajara. Comento un feliz Alberto al sacar la ultima espina y pegar un alarido tipo tarzan cuando vencía algún animal salvaje.




SOLICITUD DE OPINIÓN

Este escrito permanecerá sin la segunda parte, hasta saber si algún valiente le interesa saber el desenlace.
Favor de expresarlo en los comentarios...si mil quinie...bueno..mi....bueno cie.....bueno die...bueno uno...pone si....saldrá al aire la segunda parte..si no volverá al mundo de las tinieblas donde nunca debió dejar de ser una piedra en el empedrado de la entrada al infierno