No sé si podré seguir sintiendo tu aliento, tus besos.
Me lanzas espinas envenenadas de odio y terror. Me gustaría dormir otra noche más, como antes, sin miedo. Ya estoy cansada, vas a romper esta alma de cristal cuarteada. Pero veo que no te importa, nunca te importó. Ese juego tuyo, todo falso, terminará pronto, acabarás descubierto por aquellos que te dieron una oportunidad. JA, incrédulos!
He cogido mis maletas y algo de tu dinero, los niños también. En el frigorífico hay comida de esta mañana y de ayer, hazte de primero si quieres un huevo frito. No pongas tan alto el aire acondicionado, ya sabes que eres muy delicado y te resfrías rápido. Por si acaso, en el cajón de la televisión están las aspirinas, si te las tomas, bebe mucha agua y recuerda usar un vaso. Están en el escurreplatos, al lado del fregadero. Lávalos con lavavajillas, no con lejía. Si te ensucias la ropa, utilízala sólo con ropa BLANCA, la de color, métela en la lavavadora que está en la terraza. Sujetarás la ropa con pinzas, así no caerán al patio, pero si te pasa eso, baja por las escaleras, despacito, de escalón en escalón y cuando llegues, llama a la puerta y se educado, de esta forma no os pelearéis. Como no me fío, el botiquín está en el cuarto de baño, es esa caja de chapa blanca que cuelga en la pared con una cruz roja. En una estantería se encuentran las tiritas, póntelas para no manchar las sábanas. Hay limpias en el armario azul. Dentro he dejado un librito con las instrucciones de cómo usarlas. Cuando te las aprendas, tíralas en la basura, o en la papelera del estudio, no en el WATER. Procura no orinar fuera de la taza, y cuando hagas de vientre límpiate con papel higiénico.
Te quería:
Beatriz Alejo
PD: Te preguntaras que son los papeles que están pegados en la pared, ¿no?. Es mi número de teléfono por si tienes algún problema.
Besos irónicos. |