Fragmentos confusos
me han llevado a esto,
doce caballos de fuerza
en contra de este manifiesto.
No acepto disculpas,
no reconozco la piedad,
conciencia enterrada,
raíces pertubadoras
entrelazan nuestra orgía.
Respira y confia,
frambuesa de hielo,
sostendre tu garganta
en un perfecto silencio.
Pronto no nos diferenciaremos,
reposa en mi,
mañana no seras,
porque yo sere por ti.
Mucho antes de haberme ido,
mi dolor yacía siete pies bajo tierra,
succionando mis jugos intestinales,
murmurando mis pensamientos gastricos,
dandome una última oportunidad
de olvidar lo que elegí no creer.
Hay algo oscuro y blanco
que no me deja avanzar,
algo en mi sonrisa apocalíptica
que solo espera el momento final.
Son solo argumentos circulares
en versos añejos.,
huellas digitales en ventanas ajenas,
lagrimas comicas en tragedias unilaterales.
Secuencias psicoanaliticas
de frases infrarrojas,
tanto asi que nunca las captastes,
fluyeron por aquel río de mi sangre
intoxicando a todo espectador vecino,
el pan y el sida fueron capricho
a la sombra de nuestros placeres espaciales,
nebulosas cosmicas de sabores gaseosos
opacaron un final que nunca se anunció.
Sin mas que decir abro mi alas
y corro hacia la tormenta,
no hay mas esperanza en ti,
mi llama se apaga,
mi cuerpo cae vencido,
el sol se apaga,
los finales son abiertos,
la sonrisa en mi cara
jamás será olvidada.
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