Que triste noche hace hoy esta lloviendo, y se me entume el recuerdo, la soledad parece perpetuarse, aquí. Duele tanto el silencio cuando no hay luna, cuando las sombras viajan hacia al desierto. Cuando las luces lejanas parpadean en el vacío que da la eternidad lejana en los sueños. Dices que las sirenas evolucionaron, que ahora tienen alas, que flotan libres sobre el azul. Esparcidas como vidrios cortan los recuerdos que un día tus manos tejieron sobre el sueño aquel. Cuando no existían fríos no había miedos... solo mi alma enferma respirando líneas...
Texto agregado el 22-04-2005, y leído por 245 visitantes. (3 votos)