Vista encumbrada,
que se hace forma
con el paso
de unas yemas
desgastadas.
Huellas de dedos
sobre superficies
milenarias.
¡Vista, desvístete
de tus harapos!


Vista de suaves
contornos.
Trazos con rutas esperables,
sin escandalosas rugosidades,
sin sobresaltos inevitables.
¡Vista, desvístete
de tus harapos!


Vida adorable
a la vista extraviada.
Mezcla y sacude
el dulce y agras
de la existencia.
Vista que ciegas
con colores brillantes
las sabrosas visiones
de sabores alucinantes.


Vida sostenida al borde
del oleaje del aire,
que devora ansioso
los olores intensos,
diluyéndolos,
tragándoselos,
desapareciéndolos.


Vista admirable
a ojos cerrados.
Sensaciones casi dormidas.
Somnolencia
que entibia el corazón,
y que con agradable retirada
pausa la respiración.
Fiesta de sensaciones
encarnada.


Vista que encarcelas
los reflejos íntimos
frente al espejo
de falsas emociones.
Vista que das
la falsa certeza
de lo que creo ver.
¡Vista, desvístete
de tus harapos
de viejas visiones!