Cuando caen las hojas en tu cielo
mi arboleda encuentra un río
que las lleva a mis labios.
Te pronuncio y caes con las hojas
como un beso que en mi memoria
me diste pero en verdad
no me has dado:
Llueve encima de las brasas:
mis labios muerden tu nombre.
Eres el fuego que enciende mi silencio.
Soy la que vive por quemarse entre tus llamas
y quieres :
que lo quiera...

Victoria