Psicología: ¿Ciencia divina o diabólica?

Jober Rocha

Como todo el mundo sabe, la Psicología es la ciencia que estudia el comportamiento de los individuos y sus funciones mentales. Su objetivo final sería el beneficio general de la Sociedad Humana.
Vinculado inicialmente a la Filosofía y a la Religión, siendo estudiado por pensadores de Occidente y Oriente, recién se consagró como ciencia en el siglo XIX y, como tal, buscó dirigir su atención a los aspectos clínicos de la materia; es decir, por los motivos que llevaron al ser humano a la depresión, a las fobias, a las neurosis y a la psicosis, preocupándose más por la enfermedad mental que por la propia salud mental (quizás porque se descontrolaba al depender de factores ajenos o sobrevinientes). La psicología se dividió inicialmente en tres corrientes: funcionalismo (William James, 1842-1910), estructuralismo (Edward Titchener, 1867-1927) y asociacionismo (Edward Thorndike, 1874-1949).
Actualmente, debido a la complejidad del ser humano, la Psicología se estudia desde diferentes perspectivas: biológica, médica, psicodinámica, analítica, conductual, humanista, cognitiva, evolutiva, sociocultural, biopsicosocial y multidisciplinar. Cuenta con diversas especialidades como: Psicología Escolar y Educativa, Organizacional y Laboral, Tránsito, Legal, Psicomotricidad, Deportiva, Clínica, Hospitalaria, Psicopedagógica, Social y Neuropsicología.
La psicoterapia, a mi modo de ver, puede entenderse como el lado divino de la Psicología (en el sentido de que solo apuntaría al bien, con respecto a la salud física y mental de los individuos), teniendo unas líneas teóricas en las que destacan, como las principales: Psicoanálisis, Psicología Analítica de Jung o Análisis Jungiano, Conductismo Conductual, Humanismo, Psicoterapia Corporal - Reich, Terapia Cognitiva - Psicología Conductual, Transpersonal y Mindfulness (Psicología Mindfulness).
Otras líneas existentes serían las siguientes: Fenomenología, Terapia Gestalt y Psicología Positiva. No todos los tipos mencionados funcionan, siempre, para todos los casos en los que se utilizan, debido a alguna inadecuación entre el método y el paciente; pero el objetivo de todos ellos es el mismo, es decir, comprender, diagnosticar y tratar la patología que presentan quienes buscan la ayuda de un profesional calificado.
El lado que podría considerarse diabólico (en el sentido de que apuntaría al mal, en relación a la salud física y mental de las personas, así como a su patrimonio y su situación económica), sería aquel sobre el que algunos profesionales, desde esta y otras áreas de la Ciencia, aprovecharían los conocimientos disponibles de la Psicología sobre el comportamiento de las personas, así como los resultados de nuevas investigaciones sobre el tema, con el objetivo de utilizar dichos conocimientos para obtener beneficios económicos, de poder, de dominación, de persuasión e influencia sobre los seres humanos, sin que éstos sean conscientes de la manipulación a la que están siendo sometidos o, incluso, obligados, forzosamente, a participar de experiencias cuyo propósito y alcance desconocerían.
Entre las técnicas que se utilizarían, desde el conocimiento sobre el comportamiento psicológico de los individuos para extraer información de ellos o para orientar sus acciones hacia un fin específico, destacan en el ámbito policial y militar: La técnica del interrogatorio inverso; lavado de cerebro masivo; experimentos de privación sensorial; Gaslighting; interrogatorio mediante la inducción de culpabilidad; los falsos recuerdos implantados por la hipnosis y el exceso de estimulación sensorial.
No entraremos en los méritos de cada una de estas técnicas, ya que los interesados en conocer más sobre el tema podrán obtener más información a través de la WEB. Con respecto a la técnica del interrogatorio inverso, según quienes la aplican, solo diremos que funcionaría bien con cualquier persona cuyo comportamiento se caracterice por tener un Ego muy sensible; es decir, alguien rebelde, como niños en su mayoría. Básicamente, esta técnica se utilizaría para conseguir que el oponente haga lo que tú quieres, haciéndole hacer, precisamente, lo contrario de lo que quieres que se haga.
En los campos de la publicidad y el marketing, a menudo hay una intención deliberada de utilizar el conocimiento psicológico sobre el comportamiento de los consumidores y los votantes, para difundir información falsa, que tiene como objetivo influir en las decisiones individuales y grupales, como suelen hacer algunos institutos a través de los denominados "especialistas en marketing", que son contratados para asesorar a partidos políticos y candidatos en vísperas de las elecciones.
Estos institutos y estas empresas de marketing suelen buscar a los profesionales más experimentados en diversas áreas del conocimiento, especialmente en el campo de la Psicología, para, utilizando los conocimientos científicos más actuales disponibles, intentar influir en la masa de votantes para que ofrezcan su voto a aquellos clientes que los contrató durante campañas electorales (partidos políticos y candidatos) o, fuera de estas, para empresas públicas o privadas, interesadas en una buena imagen ante el público o en la venta de productos y servicios.
La práctica de las virtudes va mucho más allá de los procedimientos que se suelen utilizar en las campañas publicitarias; donde todo va, desde la mentira, pura y simplemente, a la falsificación de datos, a las falacias, sutiles subterfugios y técnicas psicológicas subliminales, ya que el compromiso de estas empresas es exclusivamente con quienes les pagan y no con la verdad de lo que publicitan y publicitan. Esto se aplica a la publicidad política y a cualquier tipo de publicidad y marketing, con el objetivo de influir en la elección de los individuos y las masas de la población.
En el campo militar, desde la época del filósofo y general chino Sun Tzu, cuya obra El arte de la guerra (escrita entre los años 400 y 320 a.C.) trata de cuestiones básicas para la preparación y conducción de las guerras, el conocimiento de carácter psicológico de Se analiza lo militar, con el fin de otorgar subsidios a la acción de los soberanos, con el objetivo de que siempre ganen sus guerras, sean justas o no. Lo mismo sucedió más tarde en Europa, con la obra El príncipe, de Niccolò Machiavelli (1469-1527 d.C.), en la que el autor utilizó el conocimiento psicológico sobre los individuos (sujetos), para presentar reglas de comportamiento que deberían seguir los soberanos, incluso si eran tiranos, para poder reinar y expandir sus reinos.
Más recientemente, el Proyecto Mkultra (iniciado a principios de la década de 1950), nombre en clave para un programa de experimentos psicológicos con seres humanos (con el objetivo de controlar sus mentes durante los interrogatorios y sesiones de tortura, para extraer información importante o incluso vital para ciertos gobiernos, no importa qué forma o ideología seguía), dio lugar a un manual llamado Kubark. El psiquiatra Harvey Weinstein ha vinculado directamente la investigación de control mental realizada en Inglaterra por el psiquiatra británico William Sargant (involucrado en la investigación de Mkultra) con la aplicación de drogas alucinógenas y la privación del sueño a los prisioneros. Los fármacos utilizados tenían como objetivo alterar las funciones cerebrales y manipular el estado mental de los seres humanos.
A su vez, la Programación Neurolingüística - PNL, creada en la década de 1970 por Richard Bander y John Grinder, en Estados Unidos, logró demostrar que para todo lo que hacemos, tenemos un Programa (en una analogía entre el cerebro humano y una computadora), y que estos programas pueden ser enseñados y aprendidos por cualquier persona. La PNL se puede utilizar para curar fobias (miedos intensos desproporcionados a sus causas); sin embargo, por otro lado, se puede utilizar para que personas mediocres, con propuestas mediocres, se muestren como personas superiores, con propuestas superiores, a través de procesos verbales y extraverbales responsables de desencadenar reacciones psicológicas en los individuos que las contemplan y escuchan. Sería, en este caso, la conocida “venta de gato por liebre”, como dice el refrán. Estos procesos son muy utilizados por políticos y religiosos, quienes necesitan convencer a quienes los ven y escuchan, ya que, según la PNL: "La eficiencia de su comunicación depende más de cómo será recibida, a través del mapa mental del oyente e interpretada, de lo que realmente estás diciendo”.
Como ya se ha dicho, a pesar de la importancia no mencionada de la nanotecnología, con respecto a los implantes de "chips" cerebrales; Implantes que, eventualmente, podrían llegar a orientar el comportamiento psicológico del ser humano en un futuro próximo, la Ciencia de la Psicología ha oscilado entre una aplicación que podríamos llamar divina y una aplicación considerada demoníaca. Cuál prevalecerá en el futuro de la especie humana no sabría contestar; pero, me imagino, conociendo las formas históricamente establecidas de dominación y poder y la materia prima de la que todos estamos hechos...