Dime con qué derecho me invades el alma duermes en mi pecho y dices que sos mi dama. Está bien, te lo permito pero nunca te vayas ni siquiera un minuto no me vayas a dejar penas. Déjame abrigarte con mi cuerpo déjame quitarte todo el frío te daré todo mi tiempo nunca te hablaré con desprecio. Si vienes desde lejos con muchas ganas de amar solo a ti verán mis ojos a nadie más he de mirar. Dame también el derecho de decir que eres mía y quiéreme mucho desde el primer día. AUTOR: PEDRO MORENO MORA
Texto agregado el 08-01-2019, y leído por 46 visitantes. (4 votos)