Ojos de cristal parte 9

El viernes tuvimos una fiesta para celebrar un año de trabajo y al término de uno de los centros comerciales, fue una inversión muy grande que le dio trabajo a mi gente, en esa fiesta me cambió la vida.
-mi querido arquitecto, esta fiesta es para ti – dijo Luis entre toda la gente. Estaban casi todos mis trabajadores y otras personas a las que no conozco,
-es demasiada gente – le dije.
-te traje una sorpresa. Y nos conviene que estés con ella
-¿de qué hablas? – le pregunté. Pasábamos entre el tumulto de gente.
Me llevó a una mujer para que me casara con ella, ya que su padre fue el que dio el dinero para financiar las construcciones con la condición de que me casara a su hija. Me obligaron a besarla, y Luis Maldonado se atrevió a anunciar un supuesto matrimonio entre la mujer y yo, en ese momento Julián se encontraba en el lugar y escuchó todo.
Salí corriendo del lugar para buscarlo. Me supuse que estaba en casa de su tía y fui a verlo.
-señora, buenas noches – dije lleno de vergüenza
-buenas noches ¿Qué se le ofrece? – respondió esmeralda un tanto soberbia
-¿está Julián? – pregunté
-mire joven, no sé que se trae con mi sobrino, pero llegó muy mal y se encerró en su cuarto.
Después de esperarlo en el patio de su casa hablamos
-amor – le dije al verlo
-suéltame – me expresó –qué diablos haces aquí
-perdóname, en verdad no supe que pasó – le dije ante el grave error que había cometido.
-es evidente que te vas a casar y no precisamente conmigo
-no es lo que parece. Yo no dije nada de ti para protegerte
-¿protegerme? ¿Protegerme de qué? Es claro que nadie en esa oficina sabe de mi existencia ni de tu supuesta homosexualidad. – me reclamó
-déjame explicarte – le supliqué
-no quiero saber nada, no quiero explicaciones, solo quiero que desaparezcas de mi vida. Vete
Continuara…