El reloj hace tic tac y los segundos gotean.
Debo decir: ¡que letargo!
La espera para verte parece inagotable...

El reloj hace tic tac y los segundos gotean.
Debo decir: ¡que premura!
El tiempo en que puedo verte parece en extremo finito...

El reloj hace tic tac, tic tac... Los días se escabullen, como una hormiga entre el césped.
Esta avidez por verte me sofoca y es que no conozco la espera, tic tac y la manecilla sigue
girando sobre los días.

¿Escuchas eso?
No, no es el reloj, creo... creo que es mi ritmo cardíaco descendiendo.
El ave canta; dulce...
Tu pecho vibra; sonido, que encanto escucharte.

¿Ves eso?
No, no es la manecilla girando...
El ocaso aparece; relajante...
Tus ojos se reflejan en cristales, yo gozo de tu mirada.

¿Sientes eso?
No, el tiempo es intangible...
La seda es suave; exquisita de palpar...
Tomaste mi mano, mi pecho estalla.

¿Puedes saborear eso?
Ni el tiempo tiene sabor...
La miel es dulce; un elixir en días amargos...
Suaves labios, tuyos, es un trago de vida el poder degustarlos.

El reloj hace tic tac y los segundos gotean y gotean y gotean...


-Paola Canales Ll.