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Parte IV.


Ambos señores voltean a verse incomprensibles, el teléfono descolgado tan solo hace ¡Tu! ¡Tu! ¡Tu! ¡Tu! El señor y la señora Benson no comprenden el significado de aquellas letras y números, el señor rompe el silencio:- ¿Qué significaran?-, pregunta a su mujer con un tono frustrado, -no lo sé, quizá algunas coordenadas o un código, no sé, no sé-, contesta la mujer mientras lleva las manos a la cabeza, desesperada.
-¡Ya me harté de esto!-, dijo el señor Benson mientras arrugaba el papel; va a la cocina y toma un cuchillo, -Si la policía no resuelve esto ¡iré yo mismo a ver qué sucede en esa maldita casa!-, salió y azotó la puerta de un golpe ¡tum!, la mujer cerró los ojos al sonido fuerte del portazo; volteó y miró el papel arrugado sobre la mesa, lo recogió y lo guardó en su billetera.
El señor Benson llega hasta la casa de los nuevos vecinos, gira de la perilla, pero no logra abrir la puerta ¡Ruuunnnn! Escucha el ruido de un auto que se acerca, el señor Benson corre a esconderse. Un hombre desciende de aquel auto oscuro, cierra la puerta y activa la alarma del carro ¡tun-tun! Se acerca a la puerta de su casa e introduce la llave ¡Suum! un sonido se escucha cerca; enciende las luces del patio y dice:- ¿Quién anda ahí?-, el señor Benson no contesta; el vecino pregunta una vez más:- ¿Quién anda ahí?-, camina hacia varios lados de su casa; el señor Benson sale de su escondite: –Soy yo, soy yo-, dijo mientras escondía el cuchillo en su pantalón y continúo: - Lo que pasa es que vi entrar un policía a su casa y no ha salido, pensé que tal vez algo le había sucedido así que decidí venir a ver-; -Aquí no hay nadie-, dijo el vecino secamente y prosiguió: -Puede revisar si quiere, aquí no hay nadie-, decía eso mientras señalaba la puerta abierta de su casa, -Adelante, revise…-. El señor Benson disimuladamente se asoma al interior de la casa para ver si ve algo, pero efectivamente ahí no había nadie, ni nada; ni siquiera la e sangre que había visto en las cortinas.
-Lo siento, es que me preocupé, pero quizá vi mal-, termina de decir esto y sale de aquel lugar, el vecino lo mira incómodamente, el señor Benson se aleja y llega a su casa.
En la casa del señor Benson: -No puedo creer que esté pasando todo esto-, dice mientras se paseaba de un lado a otro. –Tranquilo, todo se va a solucionar-, dice la esposa, queriendo tranquilizar a su marido. El señor dio un golpe a la mesa ¡pum! Y llevó sus manos hacia la cabeza como no sabiendo que hacer.
Al poco rato tocan la puerta ¡toc, toc, toc, toc! La señora Benson voltea y va a abrir; -¿Diga?-, otro oficial: -Buenas noches-,¡twuuuooo! Se escucha varias sirenas afuera de la casa y se ven varias luces color azul-grana, las cuales pasaban por la cara de la señora Benson, ¿Qué se le ofrece?-, dijo ella mientras se tapaba el resplandor de las luces con la mano, -Alguien hizo una llamada de aquí y dejó descolgado el teléfono, pensamos que algo malo había pasado y por eso vinimos; además también vimos una patrulla aquí afuera, pero no vemos al oficial de esa patrulla por ningún lado- contesto el policía mientras señalaba la patrulla de afuera; señora Benson:- U... Un oficial vino y entró a esa casa, pero ya no lo vimos salir de ahí-, Oficial:- Mis compañeros ya están revisando toda la zona, encontraremos al oficial Bob o a quien le haya hecho algo, téngalo por seguro-. Señor Benson desde lejos:- ¡¿Quién es?!- Oficial, inclinándose un poco para ver al señor Benson:- ¿Qué tal Sr.? Soy el oficial Álvarez, atendemos una llamada telefónica y la desaparición del oficial Bob-, el señor Benson se acerca a la puerta y el oficial continúa: -¿Han visto algo extraño?-, la pareja se voltea a ver, turbada... Señor Benson:- Será mejor que entre…-
Oficial Álvarez, tomando de una taza de café, dentro: - Haammm… ¿Me está diciendo que CREE, que sus vecinos son unos asesinos?-, señor Benson: -si, no, bueno… Lo que digo es que…-, Oficial Álvarez interrumpiendo: -Este tipo de acusaciones son muy graves, ¿si lo sabe verdad?, además necesita pruebas para acusar de esa manera a alguien-; Señor Benson: -Yo... bueno, yo... Yo le mostraré algo…-
El señor Benson regresa con la videocámara, se acerca al oficial y la pone frente a él, da ‘click’ en ‘play’ y deja que la cámara haga el resto…
Cámara con imagen que parpadea, aparecen las letras LOW BATERY, después se apaga. Oficial: -Creo que ya se descargó-, Sr. Benson: -Ho, lo siento, iré a buscar el cargador-, salió rápido y subió las escaleras.
Así que quedaron solos el oficial Álvarez y la señora Benson; ella permanecía en silencio, mientras el oficial silbaba despacio como para matar el tiempo, observando hacia todas partes y a la vez a ningún lugar. La señora Benson saca algo de su bolso y mantiene la mirada fija en el oficial, éste deja de silbar y pone atención a la señora.
Señora Benson. –Usted… ¿Usted sabe qué es esto…?-, dice eso mientras extiende su mano a donde está el oficial, éste observa atento la mano de la señora para ver qué es lo que sostiene, la mujer abre su mano y deja ver el papelito doblado, el oficial acerca su mano y toma el papel.
-¡Lo encontré!-, dijo el señor Benson mientras bajaba las escaleras; llega hasta donde estaban su esposa y el oficial, contento por hallar el cargador conecta la cámara y espera.
Mientras tanto el oficial leía susurrando:- ¿863 X666P? -…
El señor y la señora Benson voltearon a ver al oficial, éste dijo: -Esto, pues, no estoy seguro pero podría ser un código, bueno si no me equivoco, podría apostar que se trata del código de referencia de un libro en alguna biblioteca…-, el señor y la señora Benson quedan pensativos, el señor Benson murmura: - ¿De una biblioteca?-, una regresión pasa por su mente: -iré de pesca hijo, ¿Quieres ir conmigo?-, Luis: -no pá, me gustaría ir, pero tengo que ir a la biblioteca a hacer la tarea-.
Termina de recordar y voltea a ver al oficial Álvarez y le pregunta: -¿Se puede tratar de un libro que esté en la biblioteca del centro?-, Oficial Álvarez asentando con la cabeza: - Claro, es muy probable-.

¡Tuuun! Un ruidito hace que el oficial Álvarez gire su mirada hacia la cámara y dice: -Creo que ya prendó-, el señor Benson se levanta de su asiento y estira la cámara lo más cerca del oficial, de nuevo le da ‘play’ y guardan silencio…
Esta vez la imagen se ve borrosa y oscura; el señor Benson aprieta el botón de ‘acelerar’, intenta llegara a la parte donde el video tiene imagen, llega a la aparte que quiere y deja seguir el video…
El oficial parece muy atento al video, pero en éste no ocurre nada; de repente parpadea y aparece una grabación en el pasillo del interior de la casa, grabando en modo nocturno, la imagen continúa y ¡chiiiuuc! la cámara se apaga. El señor Benson incomprensible, se asegura que el cargador esté bien conectado, le aprieta varias veces el botón ‘play’, pero todo es inútil. Señor Benson: -Quizá, quizá, no sé yo creo que el cargador está haciendo corto, no sé, iré a buscar otro cargador…-
En eso ¡tttssss! Suena el radio del oficial, -disculpen-, dice el oficial mientras toma su radio:- Aquí el oficial Álvarez ¿Qué sucede?-, de la otra línea de la radio: -Oficial Álvarez tiene que venir inmediatamente, es una emergencia, repito ¡es una emergencia!-, Oficial Álvarez:- Entendido, voy en seguida-, guarda su radio y dice: -Lo siento-, solo eso y después sale instantáneamente.

Afuera, en la calle: El oficial Álvarez intercambiando palabras con otro oficial, después ambos fueron a la casa de los nuevos vecinos; los señores Benson mirándose uno al otro decidieron observar todo desde la ventana.

La casa de los vecinos ya estaba llena de oficiales, al parecer habían encontrada la linterna del oficial Bob; para sorpresa de todos, se revisó cada rincón de la casa, pero sin encontrar a nadie, ni nada que sirviera como prueba o algo sospechosos.

Sin éxito, los policías salieron, regresaron a sus patrullas y partieron.

¡Toc, toc, toc, toc!, de nuevo la puerta de los Benson, ambos fueron a ver quién era. Abrieron la puerta y pudieron ver que se trataba nuevamente del oficial Álvarez.
Oficial: -Solo regrese para decirles que encontramos la linterna del oficial Bob, pero no encontramos nada más…-, Señor Benson: -Pero, pero yo vi al vecino entrar a su casa, ya no lo vi salir de ahí y hasta cruzamos algunas palabras, ¿Cómo es posible que no lo vieran?-, oficial Álvarez: -Pues no se qué vio en realidad amigo, pero ahí no hay nadie, ni nada extraño, a excepción de la linterna, fuera de eso parece una casa muy normal-, -¿Normal?-, dijo el señor Benson algo exaltado y continuó diciendo: -¿Y qué me dice las gárgolas?-, oficial: -No sé de qué me habla señor, ahí no hay nada de gárgolas; por la mañana vendrá una grúa a llevarse la patrulla del oficial Bob, si saben algo más o ven algo REAL, no duden en llamarme-, sacó una pequeña libreta y un lápiz de su bolsillo, arrancó la hoja y la entregó al señor Benson-, Oficial: -Bueno, será mejor que me vaya, traten de descansar-. Regresa a su patrulla y hace un ademán de ‘adiós’. Entra y enciende su patrulla Ttruuuuunn! (Motor).

El señor Benson ve el número de celular en el papel, lo arruga y la tira en la calle; la señora Benson (mirada perdida), solo calla.

La patrulla se aleja, el frío aumenta, el viento silba, la noche transcurre, el misterio incrementa…


Texto agregado el 19-06-2014, y leído por 91 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
19-06-2014 prosa inmadura pichiciego
 
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