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Puedes estar seguro de que nunca te olvidaré, siempre tendrás un lugar muy importante en mi corazón. No quisiera haberte comprado, quisiera haber nacido al mismo tiempo que tú, para vivir la vida juntos e igualmente me hubiera gustado morir a tu lado; Coki, fue el nombre que te dio mi familia cuando te adquirimos, te escogieron ese nombre en honor a la mascota que tuvo mi madre cuando ella era joven. Verte pequeñito e indefenso me partió el corazón, desde que te vi, sentí que podía amar, que podía sentir la felicidad y efectivamente fui muy feliz mientras viviste.

Cuando fuimos a una de las tiendas de mascotas para adquirirte, y te compramos, fue uno de los días más felices de mi vida. En ese entonces, yo no entendía que muchos de los que venden animales lo hacen por negocio; por eso acepté comprarte en el lugar en el que lo hicimos. Hoy tengo claro que no debo promover el negocio de tus hermanos y primos. Cuando veníamos de regreso para nuestra casa y estabas en mi regazo, sentí lo que nunca puede sentir un Dios, amor verdadero, pues quería que vivieras y que me acompañaras por el resto de mis días.

Mis progenitores dijeron que debíamos dejarte en el patio, pero yo objeté, pues es muy frío, así que te acomodamos en el baño principal; siempre me preocupé de que tuvieras suficientes cobijas que fueran como un colchón para que te acomodaras bien. Aunque no te gustaba tu comida especial, a veces yo jugaba contigo para que te la comieras. ¿Te acuerdas? Yo te lanzaba las raciones en el aire para que te alimentaras. Al principio te costó adaptarte a las reglas de un apartamento y una vez te orinaste en la cama de mis padres, yo te entiendo, porque eso de orinar en un solo sitio es aburridor y tampoco estoy de acuerdo con los formalismos.

Por las mañanas, cuando te acercabas a mi alcoba y te metías debajo de mis cobijas, yo sentía como si mi corazón se llenara de bondad, allí dormíamos un buen rato, porque ¿dormir es de lo más rico que hay en la vida, no cierto? Nunca te faltó la comida, tus huesos, tus balones y otros juegos. Sé que te estresabas a veces porque la vida es terriblemente aburrida y te comprendo completamente; algunas veces yo quisiera hacer algo parecido a ti; sólo desearía dormir, pero para siempre con tu compañía. También tenía que cuidarte de que no anduvieras por ahí comiendo todo lo que encontraras, por eso siempre que podía estaba pendiente de que no estuvieras haciendo cosas que te hicieran daño. También intentamos conseguirte una pareja para que copularas, te sentiste tímido en la casa de la hembra y en la del veterinario y debido a esto mi padre terminó diciendo que era mejor que no tuvieras descendencia. Algunos descerebrados, no entienden que tú te apareas por instinto, y que los humanos que se reproducen actúan peor que las peores bestias, pero bueno, algunos nunca entenderán esto.

Me enternecía mucho cuando mi familia y yo nos sentábamos a comer y tú también te sentabas a esperar que te diéramos algo, siempre lo hacíamos, a pesar de que ya habías comido. Cada día que llegaba del colegio, mi mayor alegría era saber que estabas esperándome, te alborotabas tremendamente cuando yo, mi hermano o mis padres llegábamos al hogar; tu dicha siempre me mostró que eres lo más fiel que puede haber en la vida, Dios no te llega ni a los talones en fidelidad. Yo también me sentía dichoso de regresar a verte. Un día me dio rinitis, y un médico sacamuelas, convenció a mis padres de que te entregáramos a un veterinario. El día que te entregaron, estuve muy deprimido, casi al punto del suicidio, mi vida había perdido un gran sentido. Te visité algunas veces, supe que un vehículo te atropelló; y te tuvieron que operar, por fortuna saliste bien de eso. Luego, como todo ser vivo envejeciste, y te enfermaste; finalmente falleciste.

Me duele mucho tu dolor, y aunque el cielo no es más que una estafa para validar la vida; en mi imaginación, sueño el día en el que pueda reencontrarme contigo para pasar todo el día jugando, como lo solíamos hacer el poco tiempo que tuvimos aquí en la Tierra. Mi amor por ti y tus prójimos me está llevando a ir a la guerra por los derechos de ustedes.

Texto agregado el 05-03-2014, y leído por 156 visitantes. (2 votos)


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18-02-2021 Los animales son importantes. javi88
 
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