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Inicio / Cuenteros Locales / esclavo_moderno / Trágica noche. (Postville, IA. USA. 2005)

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Dedicado a: Nínive y Leobrizuelas. “Gracias”.


Gregorio recordó cuando vio a Gloria por primera vez en el pasillo, el júbilo al saber que compartían la misma aula. Y esa emoción a la salida, poder acompañarla a la casa.
Una tarde de junio, a sus dieciséis cumplidos, agarró valor y olvidó el cosquilleo que le alborotaba el estómago y le propuso que fuera su novia. La crisis de nervios que debió enfrentar cuando la presentó ante sus parientes, y el alivio al ver con satisfacción que sus padres la aceptaban como parte de la familia. Escuchar decir a Florencio, su padre:
—Estoy contento por tu decisión, m’hijo: ella te hará muy feliz.
Y pensar que ahora, pasados cinco años de esa declaración de amor, ella deseaba ser su mujer y así formar la familia soñada.
La abraza, la estrecha en un beso que ella corresponde amorosamente.
Los alarma el repique de campanas, y a lo lejos alguien que grita:
—¡Están robando en la iglesia!
También los vecinos del parque oyen los gritos. Las campanas siguen sonando. La noticia no tarda en esparcirse por el pueblo, y las luces de las viviendas se encienden una a una. Empuñando linternas, candiles y quinqués, la gente se precipita a las calles y se reúne en el graderío del santuario.
—¡Los maleantes están ocultos en la parte de arriba! —dice una voz histérica.
—¡Capturémosles y los linchamos para que aprendan esos infelices ladrones!
—¡De aquí no salen con vida esos desgraciados! ¿Escucharon? ¡No salen vivos!
El viejo campanario queda en silencio.
La pareja de enamorados corre hacia la multitud, que se ha armado con machetes, palos, azadones y hachas.
Entre la oscuridad y la densa niebla es difícil divisar a los saqueadores.
—¡De este lado hay un ratero!
Todos ven de dónde previno el bramido, y una mano sobresale en medio de la turba señalando el techado.
Sin pensarlo, Gregorio suelta a Gloria, brinca y se encarama en la barandilla sobre el ventanal, encima de la parte baja del alféizar. Ayudado por amigos y conocidos, trepa al techo. Con dificultad llega a la azotea para alcanzar la zona del frente, donde supuestamente el ladrón se encuentra oculto.
Un fogonazo desgarra la noche y silencia el griterío.
La sombra entre las tinieblas siente un dolor agudo, acaso en una de las vértebras. Es una bala rabiosa que a su paso ha perforado carne y hueso. La sangre ya le empapa la camisa. Tambaleándose, logra agarrarse a una de las cruces en reparación. Las fuerzas le abandonan. Los ojos se abren, y de un solo golpe se tragan el cielo y sus estrellas sin luna. El cuerpo cae a un costado del portón de la iglesia. Entre murmullos y ¡vivas!, los curiosos rodean el bulto humano que yace en la tierra. La penumbra le cede el paso a la claridad con los candiles y quinqués, y las linternas le iluminan la cara al muerto.
A grandes zancadas un vecino se aproxima, lleva una escopeta. Sofocado por el esfuerzo, se va abriendo camino a empujones.
—¡Le di! —grita—. ¡Lo tenemos al muy maldito!
Hincado en el suelo, uno del grupo examina el cadáver y reconoce la voz del recien llegado. Se levanta. En él hay confusión y angustia. Suspira hondo, y con tono lastimero le dice al recién llegado:
—¡Mataste a tu propio hijo, Florencio!


Texto agregado el 20-01-2014, y leído por 717 visitantes. (25 votos)


Lectores Opinan
05-01-2016 Me gustó tu historia. gcarvajal
23-12-2015 SIMPLEMENTE, ERIZASTE MI PIEL!!!!!1 fabiandemaza
11-11-2015 Me impresiona tu narrativa impecable. Me encantó leerte, solo aplausos para ti. Un abrazo. gsap
20-04-2015 Ahhh... el desenlace trágico, no por ser esperado -diste muchas pista- deja de ser terrible. ¡¡¡Que buena manera de narar hermano!!! Cinco aullidos aprendiendo yar
19-04-2015 Entretenidisima historia, creo que la compartiré con mis estudiantes, justamente estamos viendo cuentos de terror y suspenso. Chaltumay. trayenko
02-03-2015 Cuando uno se queda con ganas de más es que está frente un buen relato. Me he quedado con ganas de más. albertocubeiro
06-02-2015 Excelente texto, bien concebido y narrado. ¡Enhorabuena! Rubalva
10-11-2014 Encanto y violencia final, buena combinación!!! efelisa
01-10-2014 Es un relato con comienzo feliz y final trágico, lo he disfrutado mucho. mariomatera
03-09-2014 ¡Que barbaridad! se me puso el pelo con escarpias al leerte. Me recordó de alguna forma una película que vi hace tiempo: "El niño con el pijama de rallas" IMST
27-08-2014 (1) Interesante relato, para destacar el buen manejo, es decir, la buena técnica literaria para ir armando la historia de las distintas situaciones que se narran a través de un hilo conductor bastante coherente: candorosa relación amorosa entre adolescentes, histeria colectiva ante un acto vandálico, acto irreflexivo de heroísmo —como suelen ser estos— y el dramatismo del final, que aunque previsible, al menos a mí, me afectó el ánimo. sagitarion
27-08-2014 (2) Porque en mi fuero interno, antes de leer el final deseaba que el cadáver perteneciera a otra persona. Pero eso es licencia del autor, el lector sólo recrea la obra. sagitarion
20-03-2014 Me asombra lo bien que narras. Es una historia que comienza bella y termina con un final que no se desea,pero tú llevas al lector de manera suave,entreteniendolo y llegando al final entusiasmado queriendo que continúe el relato****** Victoria 6236013
19-02-2014 Tiene los ingredientes de un cuento. Entretenido, buen desarrollo, un desenlace inesperado. Bueno****** pithusa
14-02-2014 Los actos violentos, incluso cuando son en nomre del afán de defender algo que nos importa, nunca salen bien parados. Tristísimo final... Ikalinen
13-02-2014 Muy bien narrado, con un ritmo que te arrrastra a la carrera en medio de esa noche Angel_de_Arte_Oscuro
10-02-2014 Es una pequeña maravilla. O tal vez no tan pequeña. barrunta
08-02-2014 Buen cuento, bien narrado y una historia que puede pasar. jaeltete
03-02-2014 Gran imaginación al relatar la historia, dominio, expresiones y sobre todo, un desenlace sorpresa. Muy bueno, me gustó. NINI
02-02-2014 SOLEEMOS CONFUNDIRNOS AVECES EQUIVOCARNOS PERO SIEMPRE DESDE EL RAZONAMIENTO DE LO QUE CREEMOS JUSTO, PERO SIEMPRE EN ELLOS NO PODEMOS PREDECIR LOS ACONTECIMIENTOS, Y SE NOS ESCAPA DE LAS MANOS TODO CUANTO CREEMOS, UN RELATO FUERTE UN FINAL TRISTE PERO QUE NOS LLEVA A PENSAR Y RECONOSER CUANDO YA ES TARDE PARA REMEDIR LO ECHO, UN FUERTE ABRAZO, ME ENCANTO Y ATRAPO TU RELATO rolandofa
27-01-2014 ¡Cuánto me ofuscan estas historias! Qué triste que son más reales de lo que parecen.***** Solo_Agua
26-01-2014 la tensión es constante, aunque se adivina el final, la prosa fluye.. buen cuento y terrible final sendero
25-01-2014 Me gustó tu narrativa, pero también esa idea de muchedumbre que no razona tan bien pintada. Espero más cuentos tuyos. Mis estrellas. Y gracias por leerme a mí. contamil
24-01-2014 Un buen relato que mantiene al lector en tensión, con un inesperado final. Fue un gusto leerle. Saludos. Mayte2
22-01-2014 Bella narración que uno no quisiera que terminara. estrellas para su cielo le envio.***** reyabel2013
22-01-2014 Qué cabronazo... barrunta
22-01-2014 Agredezco la dedica que comparto feliz con leobrizuela. Muy bien lograda la tensión de la escena con estilo rápido y escueto. Bravo ninive
21-01-2014 Pero es un relato tremendo el tuyo! Menuda inauguración de letras.***** MujerDiosa
21-01-2014 Vaya si no fue trágica la noche. Qué equivocación!. Muy bien narrado y entretenido cuento. Saludos. biyu
21-01-2014 Como el vipérido que muerde su cola, a veces el destino nos muerde en el deseo incontrolable de hacer justicia. Excelente texto. ***** odliam
21-01-2014 Terrible historia. Me gusta como la has relatado. Un gran abrazo. glori
21-01-2014 ¡..repite...! za-lac-fay33
21-01-2014 Llevados por emociones, no se usa siempre el buen juicio. Es una historia triste que a menudo se epite. ¡Muy bueno! za-lac-fay33
 
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