Hace siglos no tenía una buena semana. Todo salió tan perfectamente ideal, que hasta me asusté un poco. Como si la vida estuviese diciendo que se ajusta por sí sola, que todo tiene un balance o te entrega en su justa medida. Pero mierda, sigo sin disfrutar. Sigo sin "sentirme" bien. Incluso ahora, a las 22: 30hrs de un puto día sábado, me siento como un pedazo de mierda. Y siento culpa, porque no disfruto y finjo hacerlo. Finjo pasarla bien, finjo tomar, finjo fumar, volarme, finjo toda puta emocionalidad. Hasta la pena es fingida. Sólo siento un puto dolor de mierda que no sé cómo expresarlo, en qué puta emoción transmitirlo o encasillarlo. Y me asfixia. Le miento a todo el mundo. Les miento cuando río, cuando tengo rabia, miento todo el día. Muestro enojo porque la situación le dice a una persona normal que debe enojarse. Y mierda... es una mierda. ¿de qué sirvió una semana de mierda decente, buena, etc? Igual, este escrito es una mierda en su totalidad. Pero escribo cuando me siento como la mierda. Siempre escribo en realidad.

Creo que a lo único que no puedo mentirle son a las palabras....