Se reúnen el amor y la razón para discutir sobre diferentes temas de la vida; lo hacen en un café, al aire libre, está haciendo un buen clima y van a tener bastante tiempo para discutir seriamente. Es la primera vez que se ponen de acuerdo para dialogar sobre su influencia sobre los humanos.

Amor: Tú no vengas a decirme que puedes explicar todo lo que sucede en éste mundo, no eres más que un mentiroso que dices tener todas las respuestas, mas lo único que haces es confundir a las personas, pues te contradices constantemente y no estás segura de lo que piensas.

Razón: Pues, me parece que es cierto algo de lo que dices, sin embargo, yo tengo claro lo que pretendo, lo que pasa es que es muy difícil cumplir mi propósito, mientras tú te metes en el medio; siempre andas idiotizando a la gente con tus cuentos y no los dejas hacer reflexiones valiosas sobre la verdad de la vida.

Amor: Cada individuo sabe lo que yo le doy, si quieren ser felices, pues que vengan a mí, que yo los voy a satisfacer, aunque luego vienes tú para intentar dañar mis planes. Me parece que estás perdido, pues a la humanidad no le interesas, ellos sólo quieren divertirse y yo me puedo asegurar de que eso suceda.

Razón: El que verdaderamente encubre la realidad, eres tú, pues no les comentas toda la verdad a tus víctimas, simplemente les haces creer que contigo podrán encontrar la felicidad perpetua, y eso no es así.

Amor: De eso se trata mi trabajo, tengo que hacerles creer que todo va a estar bien, y cuando los tengo embobados los llevo a cometer el delito más grave que existe; hago que se revuelquen en una cama para que luego la mujer quede embarazada, de esa manera entrego una nueva persona a la muerte, con lo que culmina mi procedimiento.

Razón: ¡Increíble! Tú mismo lo estás reconociendo, menos mal que no vino la muerte contigo, porque no lo podría soportar, ustedes andan juntos para todo lado; debo hacer todo lo posible para que la gente entienda que no pueden seguir enamorándose, ¿Pero cómo lo hago si siguen creyendo en ti?

Amor: (Risas) Los seres humanos son tan estúpidos que nunca te van a poner atención, yo sí los puedo convencer con mis habilidades, ellos prefieren las respuestas que los llevan a soñar, a vivir en un mundo imaginario, obviamente que no existe, pero a ellos no les importa eso, siguen creyendo ciegamente en todo lo que yo les digo.

Razón: Yo les voy a mostrar la calamidad que es la vida, lo horrible que es dedicarse a sobrevivir, las dificultades que van a tener todos los días de su existencia y el horror que van a sentir cuando estén muriendo.

Amor: No pierdas el tiempo, a ellos no les importa que tengan que sufrir extremamente, por un momento de felicidad ellos llegan a considerar sin importancia esas pequeñas tragedias, generalmente caen en mi trampa, no obstante, debo reconocerte que si ellos te obedecen, el imperio de la muerte decrecería e inclusive podría ser devastado.

Razón: Estás en lo cierto, necesito convencerlos de que dejen de multiplicarse, de esa manera tú y la muerte desaparecerían, ¡ahí está la clave para la salvación de los bípedos!

Amor: No te hagas ilusiones, la parca y yo siempre seremos más fuertes que tú, acaso no te das cuenta que ellos son unos animales, eso siempre va a ser fundamental en ellos, acuérdate de la evolución, siempre van a ser unas bestias y eso nunca cambiará.

Razón: Me doy por vencido, parece ser que están condenados a acrecentar el reino de la matanza. Adiós.