Padecí de anhedonia,
por aceptarte como mi novia ficticia,
y soy solo un tonto imaginándote,
ya he pasado 3 semanas utópicas.

Fuiste tan solo un concepto de una chica,
que mi mente aprecia perfecta,
esas líneas inhalables, tu aroma,
eres tolerante con mi pastrula persona.

Estoy incinerándome, con gotas de esmalte,
porque ya se me acabo el aguarrás,
me lo bebí con agua y cogí un viaje,
te vi pixelada.
me frotabas el abdomen
y te esfumaste.

De bruces recostada en mi cama,
ahora soy de nuevo, un ser violento,
es mi locura entre tus dientes,
pero eres tan solo ficción.

Nublada tarde, te cité otra vez,
mis padres no estaban, corrompimos el estudio
luego pasamos a la sala, ahí me encontraba,
con el pijama abajo, fornicando a la nada.

Ya no soy capaz de darle vida,
a algo inerte, pero me gusta tenerte en mis neuronas,
ese efecto placebo que tienes en mí,
esta vez te vi en la palma de mi mano.

Solo tomare un Alprazolam más,
me iré directo a tus rodillas,
tengo un ramo de flores negras,
y una caja de toffees.

Te tendí en el suelo, ya te hostigue frenéticamente,
el duelo se contuvo en una hora,
y la botella en 15 minutos,
me encanta el borgoña,
sí lo bebo echado en mi cuarto
i de tu boca.

Mi ánimo se reduce a arcadas,
el humo del cigarro ya se disipó con tu sexual figura,
el tiempo me ha orinado en el rostro
y ahora de nuevo eres silencio.

Fije la vista en las estrellas,
me licue en la atmósfera,
pise tierra, cerré los ojos,
y empecé mi tratamiento.

Yo soy mi propio psicólogo.