¿Que nos cabe entre las manos?
¿una estrella o una civilización perdida, un amor de noche o las despedidas matutinas?
Nos cabe lo que a la vez se nos pueda escurrir entre los dedos para que no seamos de ninguna cosa los dueños absolutos, nos caben el futuro, el pasado, los papeles desgastados, los que aun siguen en blanco la pluma de dios que escribe y borra que corrige.
nos caben las mentiras y los mentirosos, nos caben otras manos, copas tazas, el café de las cinco con dos de azúcar, el vino, un pedazo de cielo, tu embriagante sabor, una lagrima, tus ojos, las flores marchitas, caras felices, niños jugando, las cuatro estaciones,
y siguen casi vacías...
caben la sal, y el mar, la arena y el desierto, las tentaciones, nos caben nuestros cinco sentidos, la tierra, el agua, el aire, el fuego, y los diez mil elementos, cada uno de nuestros huesos, la dosis perfecta ,nos caben el sabor amargo de la traición y el dulce deleite de un beso robado, nos cabe lo que no acabamos aun de comprender, cabemos nosotros mismos, parados sentados, mirando de frente, cabe el mundo girando tal y como estamos colocados en las manos de dios.
en estas manos tan grandes, hay lugar para la savia, el amarillo, el dolor de muelas, el corazón roto la sangre derramándose, los diamantes, las raíces, las entrañas de la tierra, el centro de nuestra mente, las neuronas defensoras de nuestros recuerdos, el sistema de nuestra memoria, los mosquitos, la bifurcación de nuestras venas, el torrente que hierve. cabe nuestro cuerpo que se acaba y se empieza así mismo cuantas veces quiere. y después de tanto el aun hay espacio para la muerte, para el parto, para las mil y una noches, y sus mil y un amaneceres, para tres días y dos noches , el todo incluido, los adjetivos, los sustantivos, los sujetos, el verbo hecho carne, el espíritu santo- con las alas abiertas-
la fe ciega, los diez mandamientos ,el árbol en llamas ,el pecado original la manzana ,la costilla, la serpiente, los hermanos.
el cesar y lo que es de el, y dios y todo lo suyo, los clavos, las manos abiertas, la lluvia, el tiempo de los reyes y sus coronas, la señal de la cruz, el tercer día, los años que siguieron, la derecha y la izquierda, el nombre del padre.
los siete mares, las veinte mil leguas de viaje submarino, los dioses del olimpo, las patas de palo, las travesías, las liadas, el caballo equivocado,
y las manos parecen nunca llenarse...
por que también le caben el nuevo mundo sus dioses infinitos, las plumas de la serpiente, el águila, las pirámides, una piedra en la cabeza, los pies quemados, el ombligo de la luna, los cinco soles, la resignación, el reflejo de nuestra piel tostada, el fin inevitable, nos caben, la pólvora, y la sed de libertad, nos cabe el tiempo
y nos caben el ahora , y olor del final que se acerca, los temblores de tierra, el mar que se la quiere comer, cuando interrumpe su tranquilidad, entra sin permiso- caben también juan y su casa- se abre paso llevándose con ímpetu y determinación lo que nos pudo haber cabido,
el calor, la luz incandescente, los relojes, las sonrisas, siete jinetes y sus siete caballos, la mala hora, nos cabe esta pregunta y su sin fin de respuestas, nos caben por si queda duda, este poema y el hombre que lo escribió y su inspiración, nos cabe un mundo mejor, nos cabe la gloria, el fuego apagado, el destino, lo que tiene escrito para el resto de nuestros días.
al fin al cabo, nos cabe eso y mas , nos cabe todo esto a lo que llamamos vida.