misterios

con el corazón cerrado
a los misterios de tus ojos
y a tus palabras hirientes
voy caminado por entre los serenos árboles
que me miran con ojos burlones

mis pasos levantan hojas dormidas
que revolotean entre mis silencios
y el viento me recuerda tus palabras
entre susurros de desden y cansancio
que laceran mi alma sin merecerlo

estoy en el parque en libertad vigilada
a pocas manzanas de casa
y todavía resuenan, las palabras
los reproches, las simplezas

la ira efervescentemente descorchada
sube de las entrañas, saliendo a borbotones
por nuestras gargantas, en exabruptos civilizados

la luna se apiada de mi y me regala una sonrisa cómplice

deambulando en pasos de llegar a ninguna parte
me siento en el último banco, junto a la farola de la verdad
la que se apaga y se enciende, cuando le haces preguntas
y me veo muy chiquito haciendo equilibrios
por el filamento de la bombilla
y al recordar tus palabras
me caigo, pero no puedo salir del cristal de la bombilla
cárcel transparente y cerrada al vacío

se acerca un famélico perro
olisqueando papeleras
nos miramos y me reconozco en el

él, perdido, con collar, delgado, con los ojos tristes y solo
yo, huido, con anillo, delgado, con los ojos tristes y solo

el perro mueve frenéticamente el rabo, con ojos ansiosos
yo me hecho a llorar, enterrando mi cara en las manos.


Antonio © M. ( T i T o. M.)
Mayo 2011
Pensamientos Vagabundos