TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / carlosthem / El misterio de Amaranda. Prólogo.

[C:415543]

El misterio de Amaranda.

Prólogo.

La central de recuperados, quedaba en el ala derecha del gran edificio que hacía las veces de hospital.
Las puertas se abrieron hacía fuera, dejando ver entre las mismas el eco de una luz especial.
En su interior se divisaban las camillas con sus ocupantes correspondientes, conectados a los sistemas de supervivencia.
Aquellas personas, habían vuelto de un viaje muy peculiar.
Todos ellos se encontraban en fase de "resurrección".
Una "resurrección" a la que aquél lugar estaba acostumbrado a ver en sus lugareños, los nativos de Amaranda.
Nadie fuera de las fronteras de aquella pequeña ciudad, no visible en los mapas, conocía aquél milagro, aquel viaje al lado de lo desconocido y su increíble regreso del mismo.
Los habitantes nacidos en Amaranda "morían" dos veces.
La primera de ellas solía llamarse "muerte clinica", porque tán sólo estaban unas horas fuera de su cuerpo.
Al cabo de ese tiempo volvían a "la vida" de nuevo, trayendo algo más que sus propias almas.
Ese algo más, los hacía superiores al resto de los mortales.
Pero el precio a pagar era el silencio, un silencio que convertía su regreso en un auténtico misterio.
Cada uno de los habitantes del lugar, volvía con unos dones, unos dones que les habían sido conferidos en algún momento de su viaje.
Aquéllos dones incluían también, la llamada del resto de mortales, solicitando su ayuda desde algún lugar de la tierra.
Y entónces era cuando, esos dones florecían, se hacían patentes y daban sus frutos en aquellos que requerían dicha ayuda.

Se podían encontrar los siguientes dones en los mismos:

- dones de curación.
- dones de telepatía y telequinesis.
- dones de medium y visión de futuro.
- dones de ángel custodio.

En verdad, una vez que recibían dichos dones, nunca más existía en ellos la enfermedad ni la degradación cómo seres humanos.
Desde su nacimiento eran personas muy enfermas, incapaces de hacer nada por sí mismas.
Después de su "resurrección", se convertían en una especie de ejercito de super seres, preparados para atender al resto de humanos que habitaban en el mundo.
---
Desde una de las camillas se escuchó una débil voz: "enfermera, estoy sangrando más de la cuenta, ésta maldita herida no termina de cerrarse".
La enfermera entró en la gran sala y se dirigió hacía dónde se encontraba el paciente en cuestión.
"Debe de llamar a sus dones, sólo así se cerrará la herida y dejará de sangrar", respondió la enfermera con una sonrisa.
"No se hacerlo, aún es muy pronto para conocer el camino que debo tomar para llegar hasta los mismos", dijo el hombre con cara de preocupación.
"Llamaré en ese caso, al ´médico naturalista de guardia´, él le guiará en el sendero correcto para llegar a su curación definitiva", le comentó la enfermera con cara de resolución.
"Hágalo rápido enfermera, la herida duele mucho y me estoy desangrando", respondió el hombre mirando hacía su costado.
La enfermera se dirigió hacía las puertas de hoja doble, pasando las mismas, éstas se cerraron, volviendo la oscuridad a la planta de nuevo.

Escrito por Carlos Them

© Copyright Carlos Them 2008. Todos los Derechos Reservados. All Rights Reserved.

Texto agregado el 29-07-2009, y leído por 85 visitantes. (0 votos)


Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]