Nunca fué menester intentar mantener la distancia entre la carretera y la muerte, cerca de ella una flor puede convertirse en una fea mujer.
Cuando uno entra y ve de cerca al dueño de todo, ve la luz y sus valores humanos crecen hasta el pico mas inesperado. Dentro de estos valores existe la felicidad gratis, sin condimentos transgenicos, será todo natural.
Y hablando de esta fea mujer, acuerdate de aquellas sirenas que te atraen con su voz angelicalmente fina y buen físico, adorando la maldad, y haciendote partícipe de ella.