Desmemorias...

No me acuerdo, hace ya mucho tiempo….
No me acuerdo de esos días felices de la infancia, esos días donde andaba en un autito a pedal y no había nada más importante que ese autito rojo con un numero cinco a su lado.
No me acuerdo del perfume suave y dulce de mi abuela, de su bastón de madera cortito con un regatón negro de goma en la punta, ni de su gorro de lana gris que usaba para salir y su gorro verde que usaba para dormir…..
Están ya en el olvido sus termitas nuevas y la pollera a cuadritos que tan bien le quedaba, o su guisito de verduras, que era un preparado humilde y sin carne, pero de tan rico parecía que tenía el mejor lomito…
Ya he olvidado ese olor a orégano de la quinta, y el canto de los pájaros al amanecer en los eucaliptos… está lejos ya de mí, el aroma a tierra recién dada vuelta a pala y el sinuoso movimiento de las lombrices en el hermoso terrón renegrido.
A veces intento recordar…y me parece que no puedo…no encuentro en el archivo de mi memoria, las dulces horas de juegos y rizas, la casa llena de niños en mi cumpleaños y la guitarra de mi primo sonando.
Me parece ver a lo lejos , ese libro bajo el árbol de navidad….el olor a regalo parece invadir mis sueños, el papel terso y nuevo , la moña lustrosa… el pasto que había dejado a los camellos revuelto …faltaba agua en la fuente…y allí para mi ….de los reyes ….ese libro …. “Corazón de Edmundo De Amici” ….me lo dejaron los reyes …así que lo leí todo ….
Como quisiera recordar la colección de cuentos infantiles que mi madre trajo un día, a cuestas de vender un ternero pampa que criamos…….” Dumbo, Hansel y Gretel, Caperucita…Los tres cerditos…..” tantos buenos recuerdos que no puedo traer al hoy….
Cuantos sueños, cuantos días de sol , si solo pudiese recordar mi primer bicicleta Graciela, rodado 16 , llena de chirimbolos y adornos, sentir el aroma a papel de aceite que la cubría, la textura de su asiento relustroso, sus puños de goma ….que porte … tanta belleza torneada en metal y goma….
Si pudiese recordar el aroma a viejo bueno de mi abuelo…el calor de su mano enorme sosteniendo la mía pequeñita para ir a dar una vuelta por la cañada…..
Si a mi memoria viniesen los días de juego al sol con mi madre, al vóley, bailar ballet, tirar al arco….a que inocencia sagrada revestía la infancia…si la pudiese recordar.