Soy prostituta, si, tienes razón. Caigo mal por vender sexo, pero tu me caes peor por comprarlo. No me digas lo patetica que soy si eres tú el que paga para conseguir algo que la gente normal consigue gratis. No me insultes ni me mires feo. No digas que no soy digna de amor ni cariño. No mires mis pechos mientras te hablo y mucho menos trates de robarme un beso. No soy tuya y aunque me odies, siempre pagas para estar conmigo. Sabes que al mismo tiempo me adoras y por eso odias mi trabajo. Sabes que yo también te adoro por eso odio que me pagues. No sé por que sigues aquí, sabiendo que aunque te adore, haré lo mismo por dinero o por placer. No sé por que me toleras si sabes que no te soporto, si sabes que tu presencia me incomoda y que estar contigo me aburre y me intimida, por que diste muestras de afecto, por que quisiste conquistarme y no soy de las que se conquistan, por que quisiste agradarme cayendo en la tipica forma de conquista. No digas nada, no hagas nada y no mientas... pero tampoco digas la verdad.