Cada día tenemos la necesidad de tomar decisiones, pero nos viene lo primero las dudas, a que nos podamos equivocar, luego lo tenemos que asumir, a que renuncias en lo que te has acomodado, pero para eso tienes que haberte mentalizado par el paso que vas a dar.
No todas las veces tu mente y tu cuerpo te acompañan, y necesitas clasificar tu mente y armate de valor, para tomar las decisiones.
Los fines son hacerte valoración, que te sirva de orientación; luego compartir con personas, que puedan valorar si las decisiones no las tomado a la ligera, Ellos te respetarán y te apoyarán, porque lo has elegido. Cuando estés decidida´no debes postergarla, si la has tomado con claridad, te espera un futuro lleno de expectativas, positivas y nuevas ilusiones, que reforzarán tu ánimo para conseguir las metas esperadas.